El Valencia afronta el partido de vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones en Mestalla con el propósito de hacer valer el empate a dos goles conseguido hace dos semanas en San Siro y acabar con la maldición que le persigue con el Inter en las últimas temporadas.

El conjunto valencianista ha sido eliminado en las dos últimas eliminatorias directas que disputó ante el Inter, a pesar de que en ambas disputó la vuelta en Mestalla con opciones de resolver su pase.

El resultado de la ida permite al Valencia afrontar el partido dando la iniciativa a su rival, ya que el Inter necesita ganar o empatar a tres o más goles para pasar la eliminatoria.

Para este encuentro, el Valencia cuenta con la sensible baja de su capitán David Albelda por sanción, lo que provocará que, con toda probabilidad, entre Rubén Baraja en el once titular para formar pareja en el centro del campo con Carlos Marchena.

La única duda en la formación valencianista reside en saber si jugará Fernando Morientes, a quien ayer le realizaron unas pruebas médicas tras el entrenamiento, aunque ha sido incluido en la convocatoria. Si el ariete no juega de inicio, Silva podría adelantar su posición a la delantera como pareja de Villa y entraría en el once inicial Vicente Rodríguez.

Tras dar descanso a algunos de sus jugadores titulares en el último partido de Liga ante el Celta, Quique recupera a Emiliano Moretti y Raúl Albiol.

Pese al buen resultado de la ida, en el Valencia se es consciente de la dificultad de este encuentro, ya no sólo por los precedentes con el Inter, sino por el potencial mostrado por el equipo lombardo en sus desplazamientos, si bien los españoles se han mostrado muy fuertes esta temporada en Mestalla, un estadio que presentará un lleno absoluto para este decisivo choque.

La principal duda italiana reside en la medular, donde el francés Dacourt y el argentino Burdisso se disputan una plaza, ya que el entrenador Mancini no podrá contar con los lesionados Vieira y Cambiasso.