Cristina Bermúdez, secretaria de Carlos Martínez Albornoz, director corporativo bajo el mandato de Florentino Pérez, y de Juan Mendoza y Juan Ignacio Rivero, vicepresidentes de Ramón Calderón, desveló en la revista Interviú el aumento de comisiones pagadas por algunos fichajes.

"La del representante del Van Nistelrooy subió de 1,2 millones de euros a 1,5 tras la presentación del jugador por orden de Ramón Calderón", confiesa Bermúdez, que está imputada por falsificación y conspiración para delinquir en el caso de los votos por correo en las últimas elecciones a la presidencia del club.

"Si cuento todo lo que sé, es la guerra y el Madrid vuela por los aires. Estoy asustada y temo por la vida de mis hijos". Es la desgarradora confesión de Cristina, la encargada de redactar los contratos del Madrid desde que Calderón fue nombrado presidente hasta diciembre del 2006.

La secretaria de Albornoz desconoce el destino de esos 300.000 euros de la comisión del delantero holandés. "No sé si se los repartieron Badini, Bucero, Mijatovic o Calderón, pero fueron 300.000 euros redondos. Calderón lo sabía todo. Lo permitió, lo autorizó y firmó el nuevo contrato", declara Bermúdez en la revista.

También recuerda en el fichaje de Cannavaro "aparecieron siete representantes por la mañana y cinco por la tarde y uno de ellos era yugoslavo, algo que a todos nos sorprendió y nos pareció raro". Por ese fichaje, el Madrid pagó de comisión "entre 2 y 2,2 millones de euros". Asegura que en las contrataciones de Mijatovic "se han comprado jugadores por 20 millones cuando costaban siete".