El entrenador del Villanovense, Iván Ania, admitió sentirse decepcionado por el resultado, pero cree que ahora sólo queda mirar a la próxima jornada porque asegura que sabe cuál es el problema de su equipo, la falta de gol. «Nuestro nivel de eficacia es muy bajo», señaló el técnico. «Todo pasa por tener más eficacia, y eso sólo se consigue a base de confianza”. En este sentido cree que su equipo mereció marcar en la primera parte, en la que asegura que fueron mejores que su rival, aunque admite que en la segunda no sabe qué les pasó a sus hombres. «Puede ser que sea la ansiedad o las ganas de ganar, el ver que eres superior y no eres capaz de abrir en el marcador», declaró.

. «Ver ahora cosas positivas, con la sensación que te queda después del partido, es difícil pero creo que mañana, o en días posteriores, valoraremos que es un punto más y que nos queda uno menos para el objetivo, la salvación».

Al entrenador asturiano todavía no le preocupa la clasificación. “Al final hay varios equipos que se cambiarían por nuestra posición», remarcó.