En el circuito de Jerez de la Frontera ya comienzan a respirarse las jornadas de buen motoclismo. El inicio de los entrenamientos en la primera prueba del Mundial y la llegada de miles de aficionados al Gran Premio de España son los culpables de ello.

El interés este año se centra sobre todo en saber si Valentino Rossi seguirá siendo el gran dominador de GP. El italiano (Yamaha YZR M 1) continúa siendo el rival a batir por méritos propios, pero sus rivales han cambiado sensiblemente y es el español Daniel Pedrosa (Honda RC 211 V) quien encabeza el relevo generacional.

Rossi, que no ha concluido la pretemporada como él mismo hubiese imaginado debido a las vibraciones en su moto en la entrada de las curvas, no ha perdido por ello su condición de favorito, si bien es cierto que ante él se presenta un arduo trabajo, ya que muchos de los pilotos que pueden plantarle cara le son ahora unos completos desconocidos. Toni Elías, Sete Gibernau y Carlos Checa cambian de moto y su actuación es imprevisible.

250 Y 125 En el cuarto de litro, los españoles Jorge Lorenzo y Héctor Barberá se han convertido durante la pretemporada en dos de los principales gallos del gallinero, ya que ambos tienen el mismo objetivo, ser campeones del mundo, pero cada uno lo plasma de una forma muy distinta. Sin embargo, estos pilotos no serán los únicos favoritos de la cilindrada, en la que también habrá que tener en cuenta al sanmarinense Alex de Angelis, piloto oficial de Aprilia, pero en el seno de la escudería de Jorge Martínez ´Aspar´.

En 125 cc el suizo Thomas Luthi (Honda) es el campeón en título y, por tanto, el centro de mira para el resto de pilotos. Como sucede cada temporada, el abanico de aspirantes es mucho más amplio y a los italianos Pasini (Aprilia), Corsi (Gilera) o Lai (Honda) hay que unir un buen ramillete de pilotos españoles, encabezados, por derecho propio, por varios de los pilotos de la escudería de ´Aspar´.