El defensa del Real Murcia Francisco Peña, natural de Jerez de los Caballeros, que acaba de ascender este fin de semana a Primera División, destacó ayer a Efe que lo más importante de este logro ha sido que existía un buen proyecto de origen y la confianza en el mismo por todo el bloque. Peña, que recaló esta temporada en el club murciano tras su paso por el Albacete, con el que ya jugó también en Primera División, aseguró que "aunque nadie quería decir en público" que el objetivo era el ascenso, el equipo estaba hecho para ascender "y paso a paso se ha conseguido la meta".

En este sentido, resaltó que el equipo "ha dado la cara" a lo largo de la temporada, y matizó que el encuentro ante el Numancia fue decisivo y que a partir de entonces lo que había que hacer era "mantener". A su juicio, la clave en este tipo de hechos radica en "dar el hachazo" en el momento clave que llega a cada equipo en la temporada y, como ejemplo, señaló que hay equipos de Segunda División que, de seguir más tiempo la competición, conseguirían "reengancharse" a la lucha por el ascenso.

En lo personal, se mostró satisfecho con la confianza que ha tenido del técnico, Lucas Alcaraz. Peña, que seguirá en el Murcia al menos tres años más, lamentó la falta de clubs extremeños en categorías superiores, que achacó a la apuesta que se hace "por gente de fuera", cuando, a su juicio, los futbolistas regionales son iguales de competitivos "y a lo mejor cobran menos". El jugador reconoció que sigue de cerca la trayectoria del Jerez, club de su pueblo.