Jesús Gil, presidente del Atlético de Madrid, declaró a la conclusión de la reunión mantenida ayer con el entrenador, Luis Aragonés, que éste jamás ha sido cuestionado pese a los malos resultados cosechados en las últimas jornadas y aseguró que seguirá al frente del equipo.

A la reunión en la casa de la Moraleja del máximo mandatario atlético, asistieron el propio presidente; Miguel Angel Gil Marín, director general; Luis Aragonés; el portugués Paulo Futre, director deportivo; Clemente Villaverde, gerente; y el cacereño Manolo Sánchez, adjunto al secretario técnico.

"Aragonés nunca ha estado cuestionado y seguirá en el Atlético de Madrid hasta final de temporada. Hemos hablado cara a cara en la reunión y todo ha quedado aclarado. Con las declaraciones que realicé buscaba una motivación a los jugadores después de las tres derrotas consecutivas. En ese momento, y, según confirmó el marcapasos que me han implantado, estaba a 180 pulsaciones", afirmó Jesús Gil.

El presidente atlético aseguró que no se ha negociado con ningún entrenador para que haga cargo de la plantilla. "Es mentira que hayamos hablado con Schuster o con cualquier otro técnico", manifestó.

JORNADA TREPIDANTE

Tras un día frenético en el que estaba prevista una reunión entre Jesús Gil y la cúpula directiva del Atlético de Madrid y que posteriormente se suspendió, según confirmó el propio club, finalmente se produjo el encuentro en el que los citados analizaron la situación del club. Gil también pidió perdón a los futbolistas inmersos en la polémica de esta semana (Santi Denia, Jorge Otero y Lluis Carreras) de los que dijo el domingo que no tenían calidad para vestir la camiseta atlética.

"Sobre todo lo siento por Santi, todo un ejemplo. Rectificar es de sabios y nunca debí dar nombres. Me perdieron las formas, no el fondo. Hablaré con ellos porque sé que no lo han pasado bien y también tienen familia que lo han sentido", dijo.