En el resto de la jornada de la Liga de Campeones no hubo grandes sorpresas. Los dos equipos españoles que jugaron ayer miraban con lupa lo que hiciesen sus futuros rivales. En el grupo del Real Madrid, Vincenzo Iaquinta, con dos goles tras buenos servicios del joven Giovinco, salvó al Juventus de Turín de una derrota en su visita al Bate Borisov (2-2), lo que, sin duda, habría sido la gran conmoción de la jornada europea.

Por su parte, en el grupo del Villarreal, dos goles de Dimitar Berbatov y uno de Wayne Rooney le dieron al Manchester United el triunfo en casa del modesto Aalborg (0-3), en una victoria de trámite frente a un rival muy inferior y que nunca inquietó.

En el grupo F, el Bayern de Múnich y el Olimpique Lyon empataron a un gol en un partido de acciones igualadas, con mayor dominio territorial del Bayern pero con un Olimpique que mostró gran efectividad. Demichelis en propia puerta adelantó a los galos (min. 25) y Zé Roberto, en el 52, igualó. Los alemanes comandan el grupo beneficiados por la igualada sin goles entre Fiorentina y Steaua en un partido aburrido.

En el G, el Arsenal venció con facilidad al Oporto (4-0, con dos tantos de Adebayor y Van Persie cada uno) y se destaca, ya que en el otro partido el Fenerbahce de Luis Aragonés sigue sin despegar y no pasó del 0-0 en casa ante el Dínamo de Kiev, lo que le deja como colista . El futuro del entrenador español en el banquillo turco continúa muy en entredicho.