El Madrid se quedará sin Kaká para lo que resta de pretemporada y el inicio de la campaña. El brasileño fue operado ayer en Bélgica de una lesión del menisco de su rodilla izquierda y deberá guardar reposo entre tres y cuatro meses antes de volver al terreno de juego.
El problema del brasileño se ha llevado con cierto secreto en la concentración del conjunto del portugués Jose Mourinho en Los Angeles, ya que no ha habido ningún parte médico oficial hasta el miércoles mismo y se consideraba que los males del jugador, que trabajaba aparte, se debían a la pubalgia que arrastra desde hace meses y de la que evoluciona favorablemente, según la versión de los doctores.
Pero finalmente el fútbolistas ha tenido que pasar por los quirófanos, aunque según el cirujuano que ayer le intervino, el belga Marc Martens, no necesitará volver a ser operado para poner a punto su rodilla.
El jugador permane hospitalizado en una clínica de Amberes, que previsiblemente abandonará hoy ayudado únicamente por unas muletas. Está previsto que regrese a España el sábado y que vuelva a reunirse con el doctor Martens en las próximas semanas para evaluar su evolución, aunque aún no se ha decidido si la revisión tendrá lugar en Madrid o Amberes.
"Tenemos a otros jugadores y ya está", señaló Mourinho, si bien reconoció que el brasileño, que compitió en el Mundial de Sudáfrica 2010 sin problemas, "es uno de los mejores del mundo". Había puestas muchas esperanzas en recuperar para la causa madridista al mejor Kaká, pero tendrá que esperar.
