El esperado dominio de Ferrari en el GP de Italia se ha desvanecido entre la brisa que mueve los árboles del centenario parque que custodia el Autódromo de Monza. Kimi Raikkonen, accidentado en la sesión libre, no pasó de la quinta plaza en la calificación, mientras que Felipe Massa asistió casi como espectador al duelo entre los dos McLaren en el que Alonso superó a Hamilton con holgura. El español dominó todas las mangas y le bastó el primer intento de vuelta rápida para hacerse con la pole. Esa superioridad le da "mucha confianza". "Seguro que hace pensar a los rivales", explicó el bicampeón, claro favorito en la carrera de esta tarde (14.00 horas, Telecinco).

La duda de una estrategia diferente no existe. Alonso fue tres décimas más rápido que Hamilton en la Q-1, la Q-2 y podía haber conseguido la misma diferencia en la Q-3. En la manga definitiva fue igualmente tres décimas más rápido en el primer intento de vuelta rápida. No le hizo falta más. Hamilton, con dos vueltas más de gasolina quemada --una ganancia de dos décimas--, no fue capaz de batir el registro de Alonso al que ya no le hizo falta arriesgar en el segundo.

PULSO EN MCLAREN "Ha sido una buena batalla con Fernando en la crono, y lo que deseo es que en la carrera también acabemos primero y segundo", comentó Hamilton. El impensable doblete de McLaren en Monza dos semanas atrás tomó cuerpo durante la calificación. "La carrera es muy larga, puede haber sorpresas, pero la realidad es que he visto a los McLaren-Mercedes muy fuertes durante todo el fin de semana", reconoció Felipe Massa, que en ningún momento pudo acercarse a menos de cuatro décimas de Alonso.

Al brasileño solo le queda esperar una avería o un error en los McLaren. Pinta peor para Kimi Raikkonen, que partirá quinto, enlatado entre los dos BMW de Nick Heidfeld y Robert Kubica. Iceman parece perseguido por la maldición que persigue a los finlandeses en Monza --nunca ha ganado aquí un finés-- y estrelló su coche de forma aparatosa durante la última sesión libre. Fue en la frenada de la curva de Ascari, a unos 330 kilómetro por hora. Ferrari descartó cualquier problema mecánico, pero Raikkonen, aún no sabe bien qué sucedió. "Las ruedas traseras se bloquearon, el coche se fue de un lado a otro, y ya no pude evitar impactar contra el muro".

RESIGNACION DE KIMI El as finlandés utilizó el vehículo de reserva al que montó el motor del coche dañado para no ser penalizado y hoy tomará la salida con la unidad reparada al que se le colocará de nuevo el propulsor utilizado. "Evidentemente el accidente no me ha beneficiado en nada para la crono, pero igualmente creo que hoy era imposible conseguir la pole. Los McLaren se han mostrado muy fuertes como una semana atrás en los test".

Alonso, sin embargo, aún no descarta a los Ferrari porque "tienen un buen ritmo de carrera". Eso sí, celebró la pole, con el puño en alto. "No sé si lo he conseguido con más rabia, pero sí más concentrado que nunca. Me he preparado para disputar cinco carreras como si fuera la última. Tiene la victoria de primera de las cinco finales al alcance de la mano.

Solo le queda un escollo importante: la salida, un aspecto en el que esta temporada no rinde como en las anteriores. "Hemos cambiado el embrague y de nuevo montamos el que ya teníamos dos carreras atrás porque el último no funcionó bien, así que espero mantener la primera posición. Siempre es mejor luchar con tu compañero en la primera curva que hacerlo con un Ferrari o un BMW". Lo ve tan claro que ya piensa que tiene el tercer título "a tiro de piedra, dependo de mí" y apostilló: "Ah, y no me voy a retirar".