El reverso de la moneda de Gasol es su amigo Raúl López, retornado recientemente a España (Akasvayu Girona) tras dos años en Utah. Los Jazz tuvieron paciencia con él en el 2001 (llegó lesionado y se pasó un año en blanco), pero sus problemas físicos se han reproducido cada vez que ha tenido oportunidades. La NBA antepone demasiadas veces el desgaste físico a la calidad, que en el caso del base catalán es indiscutible (6,5 puntos y 1,9 asistencias en 18,9 minutos).