Los primeros sorprendidos por la irrupción de Fernando Llorente en el partido parece que fueron los experimentados centrales portugueses, Carvalho y Alves. Al menos esa impresión dio por las dificultades que encontraron para controlar a un chicarrón del que debían tener pocas noticias. Desde luego vídeos recientes de sus aportaciones a la selección española no había más que el del amistoso de hace un mes contra Arabia Saudi en Innsbruck en el que decidió el partido con un cabezazo en el tiempo añadido.

Ese día volvía a ponerse la camiseta de la selección después de casi un año de ausencia de las convocatorias. Vicente del Bosque no había vuelto a contar con él desde la Copa Confederaciones del verano pasado. Durante todo ese tiempo Güiza y Negredo fueron los elegidos como terceros delanteros.

"Intentaba no pensar mucho en mis ausencias para no tener presión. Seguí trabajando hasta el final", dice el delantero navarro, que acabó la temporada con 23 goles en todas las competiciones. Ante Portugal no marcó, pero siente el gol de Villa como algo suyo: "Fue maravilloso, salió todo a pedir de boca. Fue increíble, llevaba mucho tiempo esperando este momento", comentó tras el partido. Ayer, más tranquilo, aseguraba que él tampoco cuestiona la titularidad de Torres.