Ismael Díaz, técnico del Cacereño, resumió el encuentro asegurando que su equipo salió con una consigna clara: "ir a por el partido desde el minuto uno con valentía y haciendo un derroche impresionante. Hemos presionado a nuestro rival todo el partido, pero la mala fortuna nuevamente nos tenía reservada una desgracia. En un error de Guy, que ha hecho un partido impresionante con el hándicap de jugar con la defensa muy adelantada, llegó el gol y lo peor es la cara de tonto que se te queda".

El entrenador asturiano, con la buena respuesta de su equipo sobre el terreno de juego, matizó respecto a otros partidos que la afición "estuvo mayoritariamente con el equipo" y comentó que el Cacereño había tenido "numerosas ocasiones de gol, balones al palo, intervenciones del portero, del árbitro...", pero aseguró que las rachas goleadoras, "tanto las buenas como las malas son perecederas".