Cada vez se ven más ciclistas por las carreteras extremeñas. Ciclistas aficionados que con sus bicis hacen kilómetros y kilómetros, más por placer que para mantenerse bien físicamente. Esa cultura de la mountain bike vivió ayer una nueva confirmación en Cáceres y alrededores con la disputa de la prueba Extrema y dura dentro del circuito nacional Orbea Aventura 2009. La carrera extremeña fue la quinta de las seis de las que consta.

En el pelotón se mezclaron corredores profesionales de todo el país con muchos amateurs extremeños que salieron a mostrar sus cualidades sobre el asfalto y los caminos de tierra.

En total fueron 90 los participantes que recorrieron unos 78 kilómetros con salida y llegada en el Parque de El Cuartillo. Con la Vía de la Plata como referencia, se recorrieron parajes en los llamados Llanos de Cáceres, subiéndose al El Risco y a las inmediaciones de la Sierra de la Mosca, con especial dureza en algunos de los tramos.

Los mejores

Todos salieron juntos, pero las clasificaciones se establecieron por edades. El ganador global y de la categoría Master 30 fue Emilio Castilla, con un tiempo de 2:20:42, seguido de Juan Carlos Ramírez y Antonio Pérez. En sub-23/élite, el local José Fernando Sánchez se adelantó a Miguel Pérez y José Miguel Jiménez. En Veteranos 40 el mejor fue Javier Puente, superando a Santiago Serrano y Fernando Vallés. Y en Veteranos 50, la victoria correspondió a Juan Luis Llamas, correspondiendo el segundo puesto a Alvaro Vallés y el tercero a José Ignacio Rubio. La mujer mejor clasificada fue María José Rivera (3:32:12).

La organización fue más que correcta y no hubo caídas importantes que mereciesen atención médica, aunque sí se produjeron muchos pinchazos.