El 60% de las muertes súbitas, por un ataque cardiaco, se debe a embolias pulmonares producidas por coágulos que se desprenden de las venas profundas de la pantorrilla, tras sufrir un traumatismo o un sedentarismo prolongado.

Así lo explicó a Efe el presidente de la Fundación para el Estudio y Prevención de Enfermedades de las Venas (ESPREV), el cirujano cardiovascular Miguel Angel Santos, quien señaló que desconoce si eso es lo que le pasó al futbolista húngaro del Benfica Miklos Feher, quien murió el pasado domingo, día 25, en Guimaraes (Portugal) durante un partido, pero que cabe la posibilidad de que un mes hubiera tenido un golpe en la pierna.