Luis Casimiro, entrenador del Alta Gestión Fuenlabrada, llegará esta semana a su partido 300 en la ACB. El técnico, que podría lograr su victoria 150 en la competición, tiene "una sensación de gratitud y de agradecimiento a las personas que han confiado en mí durante mi carrera", incluyendo también a los que le ficharon en el Cáceres en la temporada 99-20000.

"Lo primero que me viene a la cabeza es una sensación de gratitud, agradecimiento a las personas que han confiado en mí. Sin duda es una cifra importante, un momento para echar la vista atrás y pensar en todos aquellos que te ayudaron a llegar hasta este punto", ha dicho Casimiro en declaraciones distribuidas ayer por la ACB.

Cuestionado sobre si su mejor recuerdo de estos años es la Liga ACB que ganó con el Manresa hace justamente diez años, explicó: "En ningún momento pensaba tener un debut como el que tuve. Sin haber logrado más títulos también estoy satisfecho del trabajo de Cáceres y Valladolid, así como el de Fuenlabrada. En el Pamesa Valencia también hubo buenos momentos, con dos quintos puestos y una final de la Copa Saporta", dijo.

"Han sido buenos momentos, pero difícilmente comparables con la liga de Manresa. Ganamos el títulos superando al Estudiantes, Real Madrid y Tau Cerámica, con el factor cancha en contra. Creo que ahora mismo es difícil que algún equipo repita lo que nosotros hicimos", añadió el exentrenador cacereño.

Sobre sus 300 partidos, se le recuerda que si vence al Barcelona serán 150 victorias, justo la mitad, y sobre esta posibilidad reflexiona: "Sería algo increíble, una celebración perfecta, aunque soy consciente de la dificultad de ganar este próximo domingo. Tener un 50% de victorias en ACB creo que es algo realmente positivo, algo nada sencillo de lograr", declaró el exentrenador del Cáceres, club en el que dirigió 34 partidos y lo situó en la novena plaza final.