Convertir en posible lo que parecía inaccesible para cualquier equipo, conquistar dos ediciones consecutivas de la Liga de Campeones, y soñar con una tercera para marcar una época en la historia del fútbol, lo tiene en su mano un Real Madrid de leyenda ante un Bayern Munich herido y obligado a remontar.

Kiev espera a uno de los dos grandes favoritos al título, cruzados por el destino nuevamente en una eliminatoria grandiosa, el clásico del fútbol europeo, que el Real Madrid cambió de dirección en su historia reciente. Ha intercambiado el papel de bestia negra ganando los seis últimos enfrentamientos, conquistando tres ocasiones seguidas el Allianz Arena.

El 1-2 de la ida gracias a la remontada con goles de Marcelo y Marco Asensio sitúan en un escenario favorable a un Real Madrid que aprendió una lección en cuartos de final. Llegaba con tres tantos de ventaja de Turín y acabó sufriendo ante el Juventus para firmar un pase agónico gracias a un penalti en la última jugada del partido.

A la gran cita llega Zidane con un par de condicionantes en su equipo titular tras la ida. En Múnich cayeron lesionados Dani Carvajal e Isco Alarcón. El primero deja una situación compleja en el lateral derecho, con Nacho sin ritmo tras un mes de baja y en el segundo Benzemá.

La opción de Gareth Bale, ausente en los onces de las eliminatorias ante PSG y Juventus hasta la vuelta ante el equipo italiano en la que duró 45 minutos en el campo, o la Marco Asensio, clave por segunda eliminatoria consecutiva ante el Bayern, tienen menos opciones.

Cristiano Ronaldo, a dos goles del récord en una edición de Liga de Campeones, necesita un acompañante arriba para encontrar espacios donde explotar su letal remate. La estadística está de parte de un Madrid que firma el récord de ocho semifinales de Liga de Campeones consecutivas y lleva sin perder en el Bernabéu en esta ronda desde 2011, cuando cayó ante el Barcelona en medio de la polémica tras una expulsión de Pepe. Desde entonces ha logrado ante su afición cinco victorias y un empate. Además solo ha sufrido una remontada europea tras ganar a domicilio la ida, con Jorge Valdano en el banquillo en 1994 ante el Odense.

Desde la temporada 2000/2001 no gana en el Bernabéu el Bayern, cuando se impuso con un solitario gol del brasileño Giovane Elber. El recuerdo del año pasado, sin embargo, cuando se llegó a Madrid con el mismo resultado, da cierta esperanza al club bávaro. Al final superó el Real Madrid la eliminatoria pero el conjunto alemán, tras haber perdido 1-2 en Múnich, logró forzar la prórroga y se sigue preguntando lo que habría pasado si no se hubiese quedado en inferioridad por la expulsión de Arturo Vidal, una de las grandes bajas ahora.

A la baja del chileno se agreganlas de Kingsley Coman y Manuel Neuer, y las nuevas ausencias de peso de Arjen Robben y Jerome Boateng por lesiones musculares. David Alaba vuelve.