CADIZ: Contreras; Vella (Chico), Miguel (Juanito), De la Cuesta, Raúl López; Cristian (Enrique), Yago, Fleurquin (José Miguel), Nano; Dani (Medina) y Gastón Casas (Acuña).

REAL MADRID: Dudek; Cicinho, Ramos (Pepe), Metzelder, Marcelo; Diarra, Baptista (Rubén de la Red), Robinho (Granero); Guti (Sneijder); Saviola (Van Nistelrooy) y Soldado (Balboa).

GOLES: 0-1, M.14: Soldado, de penalti. 1-1, M.60: Enrique. 2-1, M.74: Van Nistelrooy. 1-3, M.92: Balboa.

ARBITRO: Santana Ponce (Comité Andaluz). Expulsó a Medina y a Diarrá en el minuto 90.

El Real Madrid, pese a su victoria por 1-3 en el encuentro que decidió el tercer y cuarto puesto del Torneo Ramón de Carranza, sigue sin encontrar el patrón táctico y no desplegó un buen juego ante un animoso equipo anfitrión, el Cádiz, que derrochó voluntad y puso en aprietos a su rival, en un partido que terminó con bronca y un expulsado por cada bando.

El alemán Bernd Schuster señaló, tras la derrota de anoche ante el Betis, que los torneos de verano sirven de preparación para la competición oficial y que no se deben sacar conclusiones antes de tiempo, por lo que en la llamada final de consolación del Carranza dispuso de un equipo completamente distinto al que opuso al conjunto sevillano.

Los madridistas, con Guti de organizador y el argentino Javier Saviola y Roberto Soldado como jugadores más adelantados, pusieron pronto de cara el choque, después de que el árbitro señalara como penalti una jugada en la que Saviola cayó en el área ante su compatriota Vella, uno de los nuevos fichajes cadistas. Soldado transformó el penalti antes de que se cumpliera el cuarto de hora de partido.

Desde ahí hasta el descanso, el Real Madrid controló la situación y creó varias ocasiones de gol, sobre todo en el tramo final del período, pero la puntería de los de Schuster no estuvo afinada en ningún momento.

El Cádiz salió con renovados bríos en la segunda parte y pronto hizo lo que no había podido en toda la primera, trabajar a Dudek, como en un remate del recién ingresado Acuña, un joven delantero paraguayo que es una de las promesas cadistas.

IMPETU CADISTA Otro de los que entraron en la segunda parte, Enrique, le dio continuidad al dominio del Cádiz y en una jugada personal, en la que se fue muy bien del central brasileño Pepe, puso el empate.

Fue el holandés Ruud Van Nistelrooy, que salió ya en la fase final del partido en sustitución de Saviola, el que a los dos minutos de su entrada consiguió de cabeza el tanto que desempataba.

El tanto de delantero holandés fue una acción aislada de los madridistas y que maquilló el resultado.

El gol en la prolongación de Balboa, con la colaboración del defensa Paco Vázquez, sólo fue el epílogo de un accidentado final, en el que el uruguayo Alexander Medina dio un cabezazo al portugués Pepe y se ganó la expulsión, junto al madridista Diarrá, que también intervino en la bronca.