El Ayuntamiento de Madrid mantendrá en "reserva estratégica" el suelo para la construcción de la Villa Olímpica y otras instalaciones por si opta a los Juegos de 2020, lo que decidirá en 2011, y trabaja con la previsión de que el estadio olímpico esté listo a mediados de 2012.

Así lo dijo ayer el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, en la rueda de prensa posterior a la reunión de su Gobierno, en la que además informó de que la candidatura para los Juegos de 2016 gastó 37,8 millones de euros desde septiembre de 2006 hasta ayer, de los que el Ayuntamiento aportó 16,8 y los patrocinadores privados 21 millones.

El alcalde, que ha reiterado que la derrota de Madrid 2016 no impedirá que cumpla su anuncio de repetir como candidato a la Alcaldía en las municipales de 2011, ha negado que desde la candidatura se haya criticado la actuación del presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Jacques Rogge, en la elección de Copenhague.

"Estoy especialmente agradecido al presidente Rogge" y "no existe ningún tipo de reproche" ni hacia él ni hacia el COI en su conjunto, aseguro Ruiz-Gallardón, que opinó que en la asamblea de Copenhague "ganó quien tenía más merecimientos", aunque fuera "en relación con otros factores".