La alcaldesa de Cáceres, Carmen Heras, sonreía con la sorpresa que le tenía preparada la entrenadora del Atlético de Madrid féminas, Lola Romero. Era una camiseta del club colchonero... con su nombre detrás.

Pasaban las once y media de la mañana y el salón de plenos del ayuntamiento local, últimamente con ambiente muy tenso, rezumaba relajación. Era la presentación del partido Femenino Cáceres-Atlético de Madrid, correspondiente al trofeo Cáceres Patrimonio de la Humanidad, que se disputará el sábado (19.00 horas) en el Campo de la Federación.

La abogada María José López, vieja amiga de la alcaldesa y ahora presidenta del nuevo proyecto del fútbol femenino local, puso la ilusión ("tenemos un equipo muy bueno"); la alcaldesa la promesa ("apoyaremos; hay que estar muy orgullosos de tener un club femenino") y la entrenadora del Atlético el ánimo ("pido a la alcaldesa que no deje de apoyar esta ilusión, sobre todo en los momentos difíciles").

El equipo cacereño se presentaba así en sociedad con una representación de jugadoras en el lugar que ocupan habitualmente los concejales, con la brasileña Vania (27 años), que también estuviera en el Sagrada Cena, como uno de los referentes. La mayoría son jovencísimas cacereñas, muchas rondando los 15 años. Juegan en la Primera Nacional (segunda categoría) y, de momento, han ganado un encuentro y perdido otro fuera de casa ante el Jaén, uno de los favoritos, por 2-1.

"Tengo que pedir el respaldo como deportistas, no como mujeres", reclamó la entrenadora atlética, que firmaría un convenio de colaboración con el club extremeño. "Quizá sea más gratificante un gol para una jugadora que para el ´Kun´ Agüero", comparó, porque "no dejan de ser también deportistas", dijo Romero, remarcando la importancia de que la mujer se sienta lo mejor posible como futbolista. López, mientras, recordaba el dato: solamente el 7 por ciento de las fichas federativas corresponden a féminas.

Para equilibrar desajustes, nació el pasado año un proyecto en el que, al menos, no faltan las ganas... las ganas de divertirse. De momento, tienen ´madrinas´ colchoneras.