El Cáceres 2016 está molesto por los incumplimientos y desaires que, según su versión, está recibiendo del ayuntamiento de la ciudad. El club de baloncesto pidió hace semanas una reunión con la alcaldesa, Carmen Heras, y todavía no ha recibido respuesta. La situación, idílica hace un año cuando fue comprada la plaza de LEB Plata y el acuerdo se presentó en la sede del consistorio, se ha tornado en tensa y desagradable justo cuando el Cáceres 2016 intenta aunar apoyos para acceder a la LEB Oro la próxima temporada.
El aval de 300.000 euros para poder inscribirse está cercano a conseguirse, mientras que también se trabaja en reunir el presupuesto para competir con una mínima dignidad en la segunda categoría nacional. El ayuntamiento es considerado por el club como una institución fundamental para cualquier movimiento ambicioso, pero sus directivos digieren pésimamente que, por ejemplo, solo se haya abonado hasta el momento un tercio de la subvención de la temporada 2007-08, que asciende a 300.000 euros.
Quejas
En el Cáceres 2016 lamentan que en el espectro de los clubs locales, únicamente quienes se han quejado públicamente de tener problemas económicos hayan conseguido una mayor atención por parte del gobierno municipal. Las dos partes tienen poco tiempo para encontrar una solución al desencuentro, ya que el próximo viernes es la fecha límite para intentar el acceso a la LEB Oro.
