ATLETICO: Falcón; Valera (Pernía, m. 69), Perea, Fabiano Eller (Raúl García, m. 55), Antonio López; Luis García (Miguel de las Cuevas, m. 71), Maxi Rodríguez, Cléber Santana, Reyes; Forlán y Kun Agüero.

VALENCIA: Hildebrand; Caneira (Arizmendi, m. 75), Iván Helguera, Albiol, Miguel (Moretti, m. 46); Ever Banega (Edu, m. 58), Marchena, Maduro; Joaquín, Villa y Mata.

GOLES: 1-0, m. 10: Miguel (pp). 2-0, m. 18: Kun Agüero. 2-1, m. 28: Cléber Santana (pp). 2-2, m. 35: Mata. 3-2, m. 60: Valera.

ARBITRO: Alberto Undiano Mallenco (Comité Navarro).

El Atlético de Madrid rozó la remontada en los cuartos de final de la Copa del Rey, aunque de nada le sirvieron dos goles en los primeros veinte minutos contra el Valencia, que consiguió una sufrida y balsámica clasificación por los tantos fuera de casa para calmar su crisis de las últimas semanas.

El Atlético, que hace una semana perdió en Mestalla por 1-0, necesitaba al menos un gol. Y pronto lo encontró, en el minuto 10 y en su primera ocasión, un centro del uruguayo Diego Forlán desde la banda derecha que entre el brasileño Fabiano Eller y el valencianista Miguel acabó en la portería visitante.

Ocho minutos después, aprovechó su siguiente oportunidad. Una buena combinación de Diego Forlán, que se marchó con rapidez hacia la portería contraria, y un potente y colocado disparo cruzado del argentino Sergio Kun Agüero, tras un pase del uruguayo en velocidad, le bastaron al Atlético para tomar ventaja.

El 2-0 pasó la inquietud al Valencia, necesitado ahora de un gol. El Valencia llegaba sin excesiva dificultad al campo rival, pero sin inquietar al portero Ismael Falcón hasta que un golpe de suerte, en un despeje del brasileño Cléber Santana que sorprendió a su propio guardameta, reforzó las opciones visitantes. Y la obligación goleadora volvió de nuevo al bloque rojiblanco, mucho más cuando el joven Juan Manuel Mata, superada la media hora, enganchó un disparo imparable (2-2) para dejar en anécdota las dos primeras dianas del Atlético.

El Atlético cobró vida tras un córner que Valera acertó a enviar a la red y dar un soplo de esperanza a la hinchada rojiblanda. Sin embargo, la máxima rojiblanca de dar vida a los necesitados volvió a cumplirse.