BARCELONA - 3:

SPORTING - 0: Juan Pablo, Sastre, Gregory, Botía, Canella, Michel, Diego Camacho (Bilic, min.57), De las Cuevas (Maldonado, min.71), Rivera, Diego Castro (José Angel, min.77) y Barral.

GOLES: 1-0: Bojan, min.18. 2-0: Keita, min.42. 3-0: Ibrahimovic, min.82.

ARBITRO: Ramírez Domínguez (Colegio Andaluz). Amonestó a Barral y Rivera.

INCIDENCIAS: Partido que cierra la primera jornada de Liga de Primera División.

El Barcelona inició la defensa del título liguero con una victoria contundente por el resultado (3-0), pero poco convincente en cuanto a juego, ante un Sporting de Gijón valiente que prefirió caer goleado en el Camp Nou con una propuesta atractiva a hacerlo con un fútbol rácano y especulativo.

Fue otra noche plomiza, meteorológica y futbolísticamente hablando, la segunda que el Barça vive en tan sólo tres días. El Camp Nou no es el Luis II porque, para empezar, su césped parece una alfombra comparado con el pasto parcheado del estadio monaguesco, ni el Sporting --más osado, pero menos serio atrás-- es exactamente el Shackhtar, pero el partido recordó, por momentos, a la reciente final de la Supercopa de Europa.

Los asturianos llegaron con peligro a la portería defendida por Valdés en un par de ocasiones durante la primera mitad --Diego Castro y Barral-- e hicieron recular, durante bastantes minutos, a su rival, que por momentos parecía más cómodo jugando a la contra que llevando el peso del partido.

Pero el Barça es, hoy por hoy, mucho Barça. Tiró de pegada, de automatismos y de ese estado de gracia que dura ya casi un año para, sin hacer nada destacable, marcharse 2-0 al descanso gracias al oportunismo de Bojan y a un tremendo testarazo de Keita.

No cambió mucho el guión tras la reanudación. Barral, en dos ocasiones, y Rivera pusieron a prueba a Valdés, mientras que el Barça vivía de la insistencia de Bojan, el mejor de una delantera en la que Pedro se empeñaba en hacer de Messi sin serlo y un voluntarioso Ibrahimovic parecía cada vez más desquiciado.

Con el Sporting volcado, más espacios detrás de su defensa y un Xavi más suelto, el Barcelona disfrutó de sus mejores minutos. Pedro y Keita avisaron, e Ibrahimovic, a ocho minutos para el final, por fin cazó un balón, el que le sirvió Alves desde el vértice derecho, para enviarlo a la red lanzándose en plancha (3-0). Medio equipo se fue a abrazarle y el nuevo fichaje azulgrana pareció al fin liberado.