Tras el primer pinchazo de la temporada en el estadio Romano, que tuvo lugar el pasado domingo al empatar ante el Lanzarote, el Mérida decide pasar página y centrarse ya en el derbi del domingo (18.00 horas) en el Nuevo Vivero ante el Badajoz.

Un clásico muy esperado por ambas aficiones. No en vano el domingo se cumplen 3 años, 6 meses y 9 días desde el último enfrentamiento entre ambos clubs en partido oficial. En aquella ocasión, el 19 de marzo de 2000 el Mérida ganó 0-3 en el Nuevo Vivero con goles de Sena, Tal y Sinval.

Tras descansar ayer, el Mérida comienza esta tarde la preparación del derbi. Los de Ricardo Fernández trabajarán desde hoy y hasta el viernes únicamente en sesiones vespertinas, mientras el sábado la sesión será matinal.

Fernández recupera a su máximo goleador, Benítez, tras cumplir su sanción, aunque, por este motivo, pierde a Muiños. Oscar y Santi continuarán siendo baja por lesión, por lo que hay 18 jugadores disponibles para la cita en el Nuevo Vivero.

El técnico del conjunto romano está dispuesto a acabar con la mala racha de su equipo a domicilio. "Conseguir la primera nota en Badajoz sería muy positivo para nosotros y para nuestros aficionados. Ellos son favoritos, pero siempre llega alguien que te puede fastidiar", sentenció.

PRECIOS EN BADAJOZ

Pese a la diferencia clasificatoria entre ambos equipos, parece probable que se desplacen numerosos aficionados emeritenses al Nuevo Vivero, sobre todo, los miembros de las peñas del club.

Los precios que deberá pagar la afición emeritense son los siguientes: 21 euros los adultos y 9 los jóvenes de 5 a 15 años, en tribuna; 13 y 6, en preferencia; y 9 y 4, en fondo norte.

De otro lado, el presidente del Mérida, Paco García, expresó el pasado domingo su satisfacción porque la entidad que preside ronda ya los 900 abonados, gracias a que el goteo de nuevos socios no ha cesado en todo el presente mes de septiembre.

Las empresas, aunque no en la medida que cabía esperar, también están aportando su granito de arena. En este sentido, el club emeritense se reserva un as bajo la manga que, en breve, permitirá incluso superar la barrera del millar de abonados. De ser así, el Mérida superaría la cifra del año pasado en 350 abonados e igualaría la de hace dos años.