La UD Mérida continúa a la deriva en su futuro de incógnitas. Nada nuevo se conoce desde que la plataforma empresarial decidiera el pasado miércoles por la tarde taponar las ayudas económicas al club. Lo único certero es que la bravata de la autodenominada plataforma de abandonar los destinos económicos de la entidad emeritense, lejos de disiparse en ese principio de arrebato, ha ido tomando cuerpo y fuerza en las últimas horas. Así, la posible desaparición del club emeritense en los próximos días es cada vez más innegable, a excepción de que aparezca un salvador que se haga cargo de los 103.781 euros (más de 17 millones de pesetas).

OPINION DEL VICEPRESIDENTE

Sin embargo, a pesar de esta mínima deuda, el vicepresidente de la entidad, Paco García, declaró que "la decisión es definitiva. No estamos dispuestos a pagar deudas de etapas anteriores, a recibir más puñaladas".

Por su parte, el alcalde de la ciudad, Pedro Acedo, no cree que finalmente la entidad vaya a desaparecer, "pero me indigna que el club esté en un permanente lío. Si nos piden dinero es imposible dar más de lo que damos --42.000 euros anuales más le cesión del estadio. El ayuntamiento le abre las puertas al Mérida para buscar posibles soluciones, pero hasta ahí llega. Por eso quiero que lo dejen tranquilo", declaró.

La oposición, bajo la voz de Angel Calle, sin embargo, era más tajante: "Yo tenía la solución, pero como no fui elegido alcalde... Estoy en contra de las subvenciones, porque el fútbol lo deben pagar los socios, pero usaría mi peso político para buscar ayudas".

Los seguidores han convocado una concentración pacífica el próximo martes 22 a las 21.00 horas en la Plaza de España a través de la página web del club.