Monesterio: Castañeda; Pedro, Gallego, Marín, Paco; Pablo, Alberto (Javi, 81), Perales, Isaac; Uri (Caliche, 53) y Nordín (Santi, 70).

Mérida: Diezma; Diego, Manuel Angel, Muiño, Pepe Martínez; Jonathan Rey, Benítez; Roberto (Copito, 88), Troiteiro (Raúl, 73), Javi Vicente; y Belencoso.

Gol: 0-1. Min. 43: Belencoso.

Arbitro: Gil Manzano (1). Amonestó a Perales, Gallego, Caliche, Marín; Javi Vicente (cumple ciclo), Roberto y Jonathan Rey. Señaló 35 faltas contra el Monesterio (23 y 12) y 19 contra el Mérida (9 y 10).

Incidencias: 100 espectadores en el Municipal con más de una treintena de seguidores emeritenses. Tarde muy fría.

El Mérida ganó en Monesterio con más pena que gloria en un choque poco vistoso a ojos del sufrido espectador, que debió soportar una tarde con temperatura muy gélida en el Municipal monesteriense.

El fuerte viento reinante, que favoreció a los locales en la primera mitad y al Mérida en la segunda, condicionó el juego sobremanera. En líneas generales, el Mérida llevó más la iniciativa, pero le costó imponer su teórica superioridad ante un rival aguerrido y bien plantado en defensa.

El Mérida marcó en su primer remate entre los tres palos. Corría el minuto 43 cuando, desde la frontal del área, Jonathan Rey se sacó un durísimo disparo que sorprendió al meta local Castañeda, que sólo pudo rechazar en corto. Belencoso, con la caña preparada, sólo tuvo que empujar el balón a la red. El albaceteño suma ya nueve tantos.

En la reanudación, el partido volvió a tener muy poca historia. El Mérida sólo avisó con una falta directa de Manuel Angel en el minuto 52 que se fue alto por centímetros. Y el Monesterio únicamente lo hizo con un lanzamiento lejano de Perales en el 60, muy ajustado al larguero, que Diezma envió a córner.

Pobre bagaje ofensivo. Al menos, el Mérida, con un partido menos, logra acabar el año entre los cuatro primeros. El Monesterio sigue noveno.