El Mérida lleva varias jornadas buscando un punto de inflexión que le haga empezar a conseguir victorias, pero de momento no llega. Los más optimistas pensaron en el cambio de estación, y el otoño llegó con mejoría en el juego, pero también con la primera derrota en el Romano y la cuarta de la temporada. Ahora llega el cambio de mes. Después de que el bagaje de septiembre sea tres derrotas y una sola victoria, llega octubre cargado con cinco partidos. Comienza mañana en feudo del líder, el Marbella (18.30 horas), sin duda, el mejor campo donde buscar ese punto de inflexión que «nos dé un par de victorias seguidas» que tanto lleva demandando el técnico del Mérida, José Miguel Campos. Tras la visita a la ciudad costasoleña, el equipo emeritense recibe al Real Jaén y después visita al Atlético Sanluqueño para acabar el mes con los dos derbis regionales consecutivos, primero recibiendo al Extremadura (23 de octubre) y después yendo a Villanueva de la Serena (30 de octubre). El mes se presenta tan complicado como apasionante, pero también trascendente, pues el mal arranque liguero provoca que la necesidad romana cada vez sea más acuciante.

A pesar de la condición de líder del Marbella, Campos entiende que su equipo está preparado «para ganar en cualquier campo». Reconoce el técnico emeritense que «los partidos fuera de casa como hasta ahora no nos los podemos permitir, pero estamos en disposición de cambiarlo en este partido». Aunque el Marbella «es un equipo bien armado», Campos asegura que también «tiene puntos débiles; creo que podemos sacar un resultado positivo», concluye. H