El Mérida juega esta tarde a partir de las seis en la ciudad deportiva de Lanzarote con el objetivo menor de clasificarse para poder disputar la próxima temporada la Copa del Rey. Para que esto ocurra, el conjunto emeritense tiene que terminar con más puntos que el Ceuta (57 puntos por 59 del Mérida), el cual viaja a Melilla, que se juega a su vez terminar entre los cuatro primeros.

Es el cierre a una temporada marcada de nuevo por las dificultades de los jugadores para cobrar puntualmente, pese a lo cual el equipo se ha manejado con dignidad y ha estado cerca de poder entrar en la fase de ascenso a Segunda División por segunda temporada consecutiva.

Para este partido Milojevic no podrá contar con los lesionados Stoeten, Enzo Noir, Kevin Debris, José Mari y Carlos, con lo cual en el once titular las dudas aparecen en el doble pivote del centro del campo. Son dos puestos que se juegan tres jugadores: Chus Bravo, Xavi Moro y Fran Miranda. Para la delantera, el acompañante de Sabino en punta será bien Víctor Bravo como media punta o bien Machicado. De esta forma se jugaría con dos delanteros natos arriba.

Por parte del Lanzarote, tiene la baja de Ayoze, sancionado ya que fue expulsado en la pasada jornada.

CONFIANZA Milojevic espera a un Lanzarote "más rodado que el de la primera vuelta. Ya están salvados y no se juegan nada, nosotros sí que nos jugamos la Copa del Rey. Seguro que quieren despedirse de su afición con una victoria y me espero a un equipo suelto y sin presión".

Del partido de la primera vuelta, en el que ambos conjuntos empataron a uno en el Municipal Romano, se acordó el técnico del Mérida como de uno de los encuentros en los que se han perdido "puntos tontos" a lo largo del campeonato. Si no fuera por ellos, el equipo extremeño estaría hoy haciendo otro tipo de cálculos, pero ya tendrá que ser otra temporada. La Segunda División se mantiene como un horizonte lejano.