Esta mediodía, a partir de las doce, arranca el Mérida-Lorca, un partido que puede marcar el devenir del equipo romano en la competición de cara a la recta final de la misma. En el ambiente, las penurias de plantilla y técnicos, que durante la semana han amenazado con una huelga por la falta de cobro.

Teniendo en cuenta la clasificación, el encuentro es muy importante porque es ante un rival directo, con los mismos puntos en la clasificación, además si el Mérida gana alejaría a los lorquinos a tres puntos más el goal average (en la primera vuelta el resultado fue de empate a cero).

Desde el punto de vista anímico, teniendo en cuenta cómo lo está pasando la plantilla, la victoria sería un bálsamo, mientras que la derrota, además de complicar la clasificación, pondría a prueba la capacidad de reacción de una plantilla que habla más de sus problemas que de fútbol durante la semana.

Para la afición, las medidas que ha llevado a cabo la junta gestora son una piedra de toque. En la parroquia emeritense hay a quien no le gusta ni el horario ni los suplementos de 10 euros para socios, por lo que habrá que esperar cuál es la reacción del aficionado emeritense.

MUCHAS BAJAS En lo deportivo, Goran Milojevic no podrá contar con Jesule, Chus Bravo y Magallanes sancionados por acumulación de tarjetas. Por lesión es baja Raúl Martín, mientras que Kevin Debris se ha recuperado de las molestias que ha arrastrado durante la semana. No se puede decir lo mismo del portero, Matías Garavano, quien todavía arrastra problemas, por lo que el propio Milojevic no tomará una decisión hasta poco antes del partido de esta mediodía.

Ante tantas bajas, volverá a la titularidad Debris por Jesule en el eje de la zaga, mientras que Enzo Noir podría debutar en el once por Magallanes.

Enfrente el Lorca, también ha tenido la duda del cancerbero exemeritense, Orlando Quintana, aunque al final ha entrado en la convocatoria. Los que no han viajado han sido Pedro Baquero por sanción y los lesionados Nagore y Aarón. Estas bajas van a provocar que el entrenador lorquino, Roberto Aguirre, tenga que incluir una pareja de centrales de circunstancias adaptando al centrocampista Elías.