El fútbol siempre da la oportunidad de resarcirse siete días después y esa es la intención principal del conjunto de Jaime Molina, entrenador del Mérida, tras la mala actuación de hace una semana en casa frente al Baza. En la clasificación se está en tierra de nadie sin peligro por abajo y sin opciones por arriba, así pues, teniendo en cuenta que por el Romano tienen que pasar Portuense, Marbella, Córdoba, Linares y Alcalá, todos equipos importantes, los de Jaime Molina quieren por lo menos cambiar la imagen en casa para premiar a la sufrida afición.

El equipo podría sufrir una gran transformación en el once titular de hoy motivado por las cuatro altas y las dos bajas, a saber: en línea defensiva, si Vera volviera a la titularidad, Juan Carlos podría retrasar su posición al centro de la defensa, además podría haber cambios en los laterales, Moreno por Diego y David Pirri por Víctor Marco.

En el centro del campo además del cambio ya mencionado con la entrada de Vera, Cuevas podría caer a la banda derecha por Israel y David Pirri sustituir a Pablo Niño por la izquierda manteniendo a Víctor Marco en el lateral.

LA PUNTA Y en punta de ataque, Luciano sustituiría a Rodrigo para acompañar a Carreño e intentar hacer efectivas las oportunidades que se crean en cada partido que se disputa.

El ambiente, en cualquier caso, es de tranquilidad en un club en el que, de momento, se está consiguiendo el objetivo de no pasar apuros, algo de lo que no pueden alardear ninguno del resto de equipos extremeños de la categoría: uno, el Villanovense, está virtualmente en Tercera División, el Cerro no termina de salir de los cuatro últimos y por último el histórico Extremadura está situado en puestos de promoción de descenso.

Enfrente estará un Portuense con solamente trece jugadores de campo, por lo que José Luis Burgueña, el técnico, tendrá que tirar de la cantera. Los gaditanos saldrán esta tarde hacia Almendralejo, donde pernoctarán y esperarán la hora de un partido en el que esperan, al menos, conseguir un punto.