Mérida: Orlando Quintana, Regino, Mansilla, Juli Ferrer, Lupidio, Carlos Segovia, Granada, Carlos Rubén (Ismael, minuto 87), Cuevas, Sabino (Jandro, minuto 84) y Luciano.

Algeciras: Javi Cuadra (Félix, minuto 63), Maikez, Manuel Angel, Pedro, Checa, Nico, Alfaro, Mario, Manu, Ortiz (Francis Flores, min.83) y Angel (Alexis, min.56)

Arbitro: Ortiz Blanco. Madrileño. Mala actuación la suya. Amonestó con la tarjeta amarilla al jugador local Luciano y al entrenador del Mérida, Fabri González.

Incidencias: Se guardó un respetuoso minuto de silencio por la muerte del abuelo del segundo entrenador del Mérida, Javier de los Mozos. Césped blando. Alrededor de 2.000 espectadores en las gradas del estadio Romano emeritense.

Todos los temores que tenía Fabri González, entrenador del Mérida, en la previa, se hicieron realidad. El Algeciras venía muy mal en todos los aspectos y el Mérida podía haber cosechado un récord de victorias ayer, sin embargo en el terreno de juego no se vio eso. El equipo teóricamente víctima sacó un punto con mucha seriedad y apartó a los locales de los cuatro primeros clasificados, aunque apenas hay distancias en una reñida pugna por conseguir una plaza para intentar subir a la Segunda División.

Se vio a un Algeciras que supo tapar bien las líneas de lanzamiento del Mérida, las segundas jugadas entre Luciano y Sabino, y las inclusiones por bandas. Ofensivamente el Algeciras fue prácticamente nulo, excepto en una gran ocasión que tuvieron los algeciristas sobre el minuto noventa, si llega a entrar ese balón hubiera sido el partido perfecto para los de José Luis Montes.

El partido comenzó mucho más abierto de lo que se podía prever, con llegadas a ambas áreas, primero sería la cabeza de Mansilla la que mandara un balón al larguero tras una falta. Después sería Alfaro, por parte algecirista, el que disparara cruzado tras una buena jugada.

Si la cosa hubiera seguido con intercambios de golpes, el público hubiera disfrutado más (mejor entrada de la temporada) y la calidad arriba de los romanos, a priori, hubiera tenido más acierto. Pero nada más lejos de la realidad. El partido empezó a caer en el aburrimiento, con interrupciones, faltas y mucha en el centro del campo.

En esta batalla, los andaluces se mostraban más a gusto que los extremeños que querían mirar hacia la portería de Javi Cuadra, algo que sólo hicieron en una ocasión tras un mal despeje de la defensa, Cuevas se encuentra con el balón dentro del área pero dispara cruzado. Se llegaba al descanso sin marcar y sin haber dado sensación de peligro constante sobre la portería algecirista.

SEGUNDA PARTE Tras la reanudación, el juego no cambiaba y las sensaciones, por lo que Fabri confió en la habilidad de Ismael para crear peligro. Sin embargo, el asedio final llegó principalmente en jugadas a balón parado sin acierto por parte emeritense. También los romanos protestaron dos posibles penaltis dentro del área, el primero más dudoso en una zancadilla a Sabino y el otro bastante claro, pues Checa se llevó el balón con la mano dentro del área.

Al igual que el Mérida pudo haber ganado al final con un disparo de Segovia dentro del área, antes llegaría el susto para los emeritenses, en la jugada antes mencionada, pues los algeciristas montaron un contraataque perfecto pero Orlando Quintana salvó a los suyos en el mano a mano con Francis Flores.

En definitiva, el Algeciras que ve como muy bueno el punto que se ha llevado de Mérida. La propia actitud de los jugadores algeciristas, perdiendo tiempo desde el principio, así lo corrobora, mientras que los pupilos de Fabri, siguen sumando, se mantienen arriba, aunque no entre los cuatro pese a que muchos resultados les han beneficiado, y además la actitud de los jugadores desde el principio ha sido la de querer que se quedaran los tres puntos en el estadio Romano. Pero no pudo ser.