Baza: Félix Campo; Quinín, Mario, Pepe Díaz (Higinio, m.87), Madrigal (Pelusa, m.85); Pablo Alvarez, Sergio Porras, Porto, Duarte; Vacas y Adorno (Meroño, m.80).

Mérida: Juanma; Canterla, Ríos, Muiño, Sergio Benito; Keita (Lezaun, m.73), Juan Jesús, Jorge Rodríguez (Federico, m.60), David Hernández; Benitez (Juanfran, m.81) y Troiteiro.

Goles: 1-0, M.36: Pepe Díaz. 2-0, M.57: Pepe Díaz.

Arbitro: De Pintos Francés. Amonestó al local Quinín y al visitante Canterla.

Incidencias: Partido disputado en el campo municipal Constantino Navarro ante unos 1.500 espectadores. Terreno de juego en buen estado. Se guardó un minuto de silencio en memoria del hermanastro de Félix Campo, portero del club granadino, fallecido en la última semana.

El Mérida ha dado un paso atrás en sus aspiraciones de conseguir una plaza para disputar la Copa del Rey tras la derrota ante el Baza, que luchaba por un objetivo bastante diferente como era asegurarse la permanencia, en un partido muy igualado en el que los granadinos han demostrado tener más ganas y empuje que su rival. Con la victoria, los granadinos se dieron un enorme respiro y, después de unas semanas muy complicadas en su temporada de debut, tienen asegurada la permanencia.

El Mérida decantó por una formación de 4-4-2, con Jorge Rodríguez y Keita en el centro del campo, mientras que Juan Jesús y Troiteiro realizaron rápidos avances en ataque.

Por su parte, la defensa emeritense prefirió situarse muy adelantada, confiando en los fuera de juego en que han incurrido sus contrarios.

La primera parte no registró apenas oportunidades en ambas áreas, la primera de ellas llegó en el minuto 9 y fue para el Mérida, cuando Benito se escapó por la banda y lanzó fuerte a la escuadra del Baza.

En el minuto 30, el entrenador local cambió de banda a sus dos laterales, Adorno y Pepe Díaz, una medida que le ha dado buenos rendimientos en anteriores ocasiones.

DOMINIO DE LOS LOCALES Las llegadas del Baza se incrementaron, aunque morían en la línea de tres cuartos y no creaban ninguna oportunidad clara de gol, pues los granadinos no lanzaron en ninguna ocasión entre los tres palos del Mérida antes de la media hora de juego.

Sin embargo, en el minuto 36, el rápido delantero bastetano Pepe Díaz se hizo con un balón en la banda y enchufó un disparo seco y fuerte ajustado al palo izquierdo que supuso el 1-0.

En el minuto 44, el local Madrigal se quedó solo en el área, pero no acertó a cabecear un centro al área en una inmejorable ocasión de gol.

Al contrario de lo que cabía esperar en un principio, la segunda parte sirvió para destacar las carencias del Mérida y destacó las bondades del Baza.

Los centrales extremeños Keita y Jorge Rodríguez se volvieron a adueñar del juego, pero su control no trajo ningún rendimiento para su equipo.

El Baza adelantó sus líneas y, en el minuto 57, Adorno se internó por la banda izquierda y centró, el balón pasó por delante de varios defensa que no despejan, con lo que Pepe Díaz sólo tuvo que disparar a la portería y conseguir su segundo tanto.

Se esperaba, de nuevo, que este tanto fuera un revulsivo en el Mérida, y Arnai, entrenador emeritense, un tanto enfadado, decidió sacar del partido a sus centrales, con la intención de dar más mordiente a su equipo.

Pero fue el Baza el que dispuso de varias oportunidades, pues, en el minuto 65, Madrigal desperdició una buena ocasión y, el mismo jugador, en el minuto 74, cabeceó fuera un balón en el área pequeña.

SIN REACCION Los visitantes seguían sin reaccionar y perdían el balón a la más mínima oportunidad, con lo que demostraron no poder afrontar un resultado tan abultado en contra.

El jugador del Mérida Benitez lo intentó desde lejos en el minuto 78, pero lanzó fuera, lo que daba cuenta de la poca fortuna de los granadinos en el partido.

En vista de que los romanos parecían haber dado el partido por perdido, los bastetanos intentaron añadir algún gol más a su cuenta y se lanzaron al ataque.

Pero el resultado no varió, a pesar de un disparo a balón parado del emeritense David, en el último minuto, que puso algo de emoción al final.

El Mérida tendrá que esperar, si gana su último partido, a una carambola para meterse en la Copa del Rey, mientras que el Baza se aseguró la permanencia en la categoría ante el júbilo general de sus aficionados.