Leo Messi se sentará en el banquillo de los acusados, junto con su padre Jorge Horacio, por defraudar 4,1 millones de euros al fisco entre el 2007 y el 2009. El árbitro del partido, en este caso el juez de Gavà Manuel Alcover Porvo, ha dictado la apertura de juicio oral tanto para el delantero como para su progenitor por tres delitos contra la Haciencia Pública.