Apenas faltan unas semanas para que los equipos inicien la pretemporada y el exportero del Cacereño, Félix Campo Alonso, aún no decidido cuál será su destino. Una cosa tiene clara el futbolista salmantino: su padre seguirá como presidente de la entidad verde.

"Si vende o no el club es una película que ya he visto otras veces", explica Campo, que en estos días descansa con su familia en Salamanca. Se muestra confiado de la continuidad de Félix Campo como máximo dirigente del club extremeño; le ve "con muchas ganas y mucha fuerza", comprometido con el nuevo proyecto: "Tiene mucha confianza puesta en el nuevo técnico --Bernardo Plaza--, habla muy bien de él y nos da muy buenas referencias de su trabajo".

Tampoco parece nervioso cuando se le pregunta sobre su futuro, a saber todavía donde jugará. Sí tiene claro que no seguirá en Cáceres, aunque se lo pidiese el entrenador: "no creo que Bernardo llegue al club a deshacer lo que han hecho otros; cuando nos han dicho que no cuentan con nosotros es porque ya está todo planificado". Ese no es su único argumento: "mi etapa allí ya se ha cumplido, es el momento de buscar otro lugar y dar paso a los que vienen por detrás", comenta desde la distancia, ya desvinculado del club.

Prefiere ser prudente, "porque no creo que me convenga anunciar cuáles son mis preferencias ni las opciones". Sin embargo, niega rotundamente que Ismael Díaz le haya ofrecido marcharse con él al Palencia: "hemos hablado, pero de temas personales, somos amigos".

El descenso y las lesiones

El joven guardameta ha sido el portero titular en las dos últimas campañas. Sólo las lesiones, como la sufrida esta temporada, le han impedido estar bajo los palos. Precisamente esta circunstancia es la que considera clave del descenso: "Ha habido jornadas en las que nueve compañeros han sido baja por problemas físicos", añade.

Félix Campo Junior , como le conocen en la grada del Príncipe Felipe, sólo ve una gran víctima tras el descenso: "Ismael, que ha dado la cara y se ha llevado todos los palos".