No ha alcanzado los siete oros de Mark Spitz en los Juegos Olímpicos de Múnich-72, pero, con 19 años, el estadounidense ha sido la estrella de Atenas. Ganó los 200 y 400 estilos, los 100 y 200 mariposa, y los 4x100 y los 4x200 libres. Sumó además dos medallas de bronce. Su balance puede considerarse estupendo, aunque las expectativas que había generado puede que finalmente le pesasen, así como la diversidad de las pruebas en las que participó.