Mike Hansen, presidente del CB Valladolid-Comercial Ulsa, recién ascendido a LEB Oro en apenas dos años de existencia, confía en poder afrontar el reto económico que supone este nueva etapa en una categoría donde el canon «es el doble y más caros los jugadores, arbitrajes y desplazamientos».
«Hay que doblar el presupuesto y mirar con lupa los números para no dar pasos en falso porque la filosofía de este club ha sido la de pagar al día», analizó quien fuera como profesional jugador del Cáceres CB en una entrevista con la Agencia Efe minutos antes de asistir con jugadores, directivos, técnicos y patrocinadores a una recepción en el Ayuntamiento de Valladolid. Jugador tmabién del desaparecido Fórum Filatélico de Valladolid (1994-1997), Hansen ha expresado su satisfacción por este retorno a la máxima categoría del baloncesto español, después de la Liga ACB, por parte de un club recién nacido, heredero de un histórico y que ha atravesado serias dificultades desde su nacimiento. «Hemos pasado muy malos ratos, con muchos problemas y un sufrimiento excesivo, dejando de lado a la familia y a los hijos por amor al baloncesto, pero al final todo ha sido satisfacción y se ha cumplido lo que soñaba».
