El primer cuarto, con 29-11 a favor de los locales, bastó para liquidar un duelo desequilibrado en potencial entre los dos contendientes. El Melilla pasó por encima del Cáceres Patrimonio (94-65) enarbolando la bandera de la superioridad, a lo que pudo ayudar que los extremeños, con la salvación virtual prácticamente lograda, dieron muestras de cierta relajación en el inicio por su situación. Cuando quisieron realmente reaccionar ya fue tarde. En teoría, da prácticamente lo mismo, aunque la permanencia en esta temporada tan accidentada aún no es un dato matemático para los cacereños. Sí puede serlo si pierde el filial del Barça mañana.

Solamente con el 0-2 inicial vio ventaja extremeña. El resto, excepto unos muy buenos minutos en el tercer cuarto de los de Ñete Bohigas, fue un monólogo de los melillenses, que acreditaron su condición de ser uno de los favoritos para el ascenso. Del mismo modo, se tomaron venganza de la derrota de la primera vuelta en el pabellón Multiusos.

El Cáceres anotó su primer triple (Sergio Pérez) en el minuto 19. El dato lo daba todo sobre un equipo que vive mucho del tiro de fuera. El Melilla, casi infalible desde el lanzamiento exterior y poderoso dentro, se dio un festín tremendo. Con el 49-25 en el minuto 19 estaba bastante claro el panorama.

SEGUNDA MITAD / Tras el paso por vestuarios, el Cáceres mejoró ostensiblemente en ataque y apretó en defensa y se puso primero a 15 puntos (56-41, min. 24), lo que hizo que Alejandro Alcoba pidiera su primer tiempo muerto. Kesinro se estaba dando un festín con un 59-48 (min. 27) y Rolandas Jakstas le acompañaría en el acierto ¿Habría partido? Parecía que a poco que siguiera la dinámica, sí.

Puro espejismo y pronto se pudo ver el 69-50 y el correspondiente tiempo de Ñete Bohigas (min. 28). El equipo melillense, con Kapelan y Edu Durán atinadísimos de fuera, anotaron compulsivamente para situar la ventaja por encima de los 20 puntos al final del tercer cuarto (76-55).El último cuarto fue para olvidar. Tardó cinco minutos en anotar el Cáceres, lo cual explica bien a las claras qué ocurrió realmente. El Melilla se daba una fiesta al amparo de su superioridad física y de fe ante un Cáceres roto.

El próximo viernes, ante el Castelló en el Multiusos, se puede celebrar realmente la permanencia en la segunda categoría más importante del baloncesto español. Será el penúltimo encuentro de liga regular y último en casa que se dispute esta campaña. El cuadro extremeño, a menos que haya una concantenación de sorpresas y resultados inesperados, habrá logrado definitivamente el objetivo, que anoche no era matemático, pero que ya se ha dado prácticamente por hecho tras la gran victoria en pista del Araberri de Vitoria.

De la jornada, destacar que el Breogán ya tiene el ascenso a Liga Endesa tras vencer al Sammic vasco, que de paso está también muy cerca del descenso a la LEB Plata. Se desató la locura en la cancha y en un club que regresa a la máxima categoría 12 años después de haber descendido.

melilla94

cáceres65

3Marcador por cuartos: 29-11, 52-30, 76-55 y 94-65 (final).

3Árbitros: Gonz´ález Gálvez y Martínez Khon. Sin eliminados.

3Pabellón: Javier Imbroda.

3Espectadores: 800.

3Melilla: Kapelan (19), F. Durán (14), Rubio (9), Lucas (13) y Fall (4) --cinco inicial-- Samb (8), Edu Durán (6), Dani Rodríguez (5), Pablo Almazán (7) y Guerra (9)

3Cáceres: Guillermo Corrales (5), Luis Parejo (6), Willl Saunders (11), Rolandas Jakstas (16) y Olajide Keshinro (13) --cinco inicial-- Pol Oliver (2), Sergio Pérez (3), Robertas Grabauskas (2) y Nicola Rakocevic (7).