El problema de Montecarlo no es sólo que se corra por las calles de una ciudad revirada, retorcida, con subidas y bajas, como si se tratase de un tobogan, túnel incluído, o que se corra peligro de acabar en el agua, rescatado por buzos expertos, que merodean por la recta del puerto con su inmenso zodiak esperando que alguien acabe en el agua. O no.

El problema de Montecarlo es que, tecnicamente, es materialmente imposible poner el coche a punto para una carrera tan atípica. "Aquí", explicaba ayer el francés Denis Chevrier, responsable de los motores Renault, "no te sirve de nada tener una puesta a punto ideal, lo mejor es conseguir la menos mala de todas".Sin referenciasEs evidente que la potencia en Montecarlo sirve de poco, casi de nada. "Este es un gran premio atípico donde incluso aquellos coches, aquellos pilotos, que durante el resto del campeonato no brillan en ningún trazado aquí, consiguiendo una buena vuelta rápida el sábado, se mete delante en la parrilla y te complican la vida durante todo el gran premio", explica Fernando Alonso, restando importancia al poder del motor.Cuando piensan en Montecarlo, todos los pilotos piensan en el sábado, en su vuelta rápida. "Aquí, más que en ningún otro sitio, es primordial salir bien, conseguir el mejor lugar posible en la parrilla. Aquí sí que es vital no fallar el sábado", comenta Jenson Button, la gran revelación de la temporada a los mandos del BAR-Honda.Los pilotos, que temen a la lluvia como al demonio (

"Este es un gran premio atípico donde incluso aquellos coches, aquellos pilotos, que durante el resto del campeonato no brillan en ningún trazado aquí, consiguiendo una buena vuelta rápida el sábado, se mete delante en la parrilla y te complican la vida durante todo el gran premio",

"Aquí, más que en ningún otro sitio, es primordial salir bien, conseguir el mejor lugar posible en la parrilla. Aquí sí que es vital no fallar el sábado",

"si llueve, la pista se convierte en un espejo pues los pasos cebras, las flechas y los carteles pintados sobre el asfalto son muy resbaladizos y pierdes agarre",