MORALO 0: Toni García, Modesto, Oscar Castillo, Rodri (min. 46, Borrallo), Emilio Pinto, Tito, Isidro (min. 72, Jaro), Diego Pérez, Diego Carrasco (min. 74, Alberto), Jorge Fernández y Jacinto.

SEVILLA B 1: Javi Muñoz, Marañón, Pablo, Carlos Pérez, Dani, Yoni, Lolo, Bezares, Adri (min. 46, Kepa), Joaquín y Marcos Gallego (min. 57, Vergara).

GOL: 0-1, min. 46: Tito, en propia puerta.

ARBITRO: Cuesta Ferreiro (Madrileño). Mostró cartulina amarilla a los locales Diego Carrasco y Diego Pérez y a los visitantes Vergara, Lolo, Joaquín y al segundo entrenador.

Ni siquiera ante un rival directo pudo ganar el Moralo. Ya son ocho jornadas sin hacerlo en un periodo de crisis en el que sólo ha marcado un gol y sólo ha sumado un punto. La derrota por la mínima ante el Sevilla B le coloca en una situación muy complicada. Esta semana será decisiva porque terminará la reestructuración de la plantilla con nuevos fichajes. Por otro lado, el presidente Antonio Aldana ratificó en su puesto al entrenador Miguel Angel Iglesias afirmando que "tiene toda mi confianza y no está cuestionado".

En cuanto al partido ante el filial del Sevilla, el resultado se decidió en una jugada de mala suerte para los locales, ya que por segundo partido consecutivo volvieron a marcarse un tanto en propia puerta. En la primera jugada de la segunda parte, el sevillista Lolo bota una falta pegada a la banda izquierda y su centro lo intenta despejar Tito, pero remata hacia atrás y el balón se cuela fuera del alcance del meta moralo.

EL MORALO SE HUNDE

Este gol hundió al equipo de Miguel Angel Iglesias. En el primer tiempo había realizado un juego bastante aceptable plantándole cara a los jóvenes jugadores del filial sevillista, pero con el marcador en contra le pudo mucho más la presión de su racha negativa reciente.

Las mejores ocasiones desde entonces fueron para el conjunto hispalense y Toni García evitó una derrota más abultada. Debutó en el Moralo el gallego Diego Pérez y se estrenó en Segunda División B el juvenil Jaro, hijo de Jarillo, que militó en el Moralo en la década de los ochenta.