Moralo: Sete, Parri, Barbero, Luis Trujillo, Dani Guerrero, Oliver (Viola, minuto 80), Manu (Marcos, minuto 87), Marcos Blanco, Juli, Beni Besale y David Alejo (Santi, minuto 84).

Jerez: Roberto, Leo, Javi, José David, Aitor, De la Cruz (Guille, minuto, 58), Monforte, Teo, Joaquín, Avalos y Juanfri (Joseli, minuto 80).

Gol: 1-0, minuto 6. David Alejo.

Arbitro: Tostado Rodríguez (3). Tarjetas amarillas al local Viola y a los visitantes Javi, De la Cruz y Guille.

Incidencias: 250 aficionados acudieron ayer al estadio Municipal de Navalmoral de la Mata.

Ha ganado el Moralo sus dos últimos partidos en casa y eso, que es una renta normalita para un equipo instalado en objetivos de la zona alta de la tabla, ha significado para el Moralo lo mismo que las lluvias de esta primavera para los pantanos. Es decir que casi ha desaparecido el problema de la sequía pero todavía hay que esperar. Ayer justa victoria de los de Salvo ante un Jerez empeñado en ser quinto y que comparte con el Moralo la gran cantidad de futbolistas que han pasado por su plantilla esta temporada. Lo dijo Pastelero, entrenador visitante, al final: "así es imposible".

Y no fue un partido para enmarcar pero dentro de la mediocridad del presente campeonato los aficionados se fueron con la sensación de que había merecido al pena acudir al Municipal. El Moralo jugó a la anticipación durante los noventa minutos y fruto de su esfuerzo en cada balón dividido y en cada rechace llegó el triunfo. Incluso cuando el Jerez quería el empate con más ganas, el Moralo decidió defenderse atacando y evitar los problemas que tuvo en otros partidos.

El tanto de la victoria cacereña llegó pronto. A los seis minutos de juego prolonga Juli la pelota para la carrera de David Alejo que se escapa por la izquierda, el meta Roberto se equivoca al adelantar su posición y el delantero le bate por alto. Décimo tanto de Alejo que adelanta a Beni Besale en la clasificación de goleadores del Moralo.

INOFENSIVO RIVAL Tuvo muy pocas ocasiones el Jerez porque cuando atacó, en el tramo final de partido, no encontró el peligro frente a Sete. Por contra el Moralo pudo sentenciar si Oliver hubiera tenido más fortuna en dos remates peligrosos en la primera parte y si en la segunda el equipo local no se hubiera encontrado con la madera de la portería templaria. De esta manera, Parri remató al palo un corner en el minuto 55 y en el 62 un lanzamiento lejano de Beni Besale lo repelió el larguero.

En fin que ya llueve menos y el Moralo acaricia la permanencia matemática. El Jerez esperará tranquilo el final del torneo y tiempos mejores.