En medio de la guerra interna entre Jose Mourinho y Jorge Valdano ha aparecido la figura de Florentino Pérez para intentar mediar en un conflicto que no parece tener solución. La decisión del presidente del Real Madrid de apartar al director general de las decisiones sobre fichajes confirma la mala relación entre técnico y director general y el nuevo posicionamiento del dirigente blanco en favor del entrenador portugués. Nadie sabe cuál será el futuro de Valdano, pero ahora sus tareas quedan muy reducidas.

En el Madrid no hay muchos minutos de paz. La ansiedad por revertir la situación deportiva arrasa con todo y convierte el día a día en un estado de angustia. Lejos de mitigar ese estado de cosas, la llegada de Mourinho no ha ayudado. Antes de aterrizar en el club blanco, se sabía que su relación con Valdano no era buena. Ambos firmaron una paz el día de la presentación del portugués, que inmediatamente se comprobó que era ficticia.

Después de varios encontronazos, Florentino mostró su apoyo a Valdano, justo después de que Mourinho incendiara el club sacando una lista de 13 errores arbitrales y quejándose de la falta de apoyo de la entidad tras el partido ante el Sevilla. "Valdano es el que mejor representa la imagen del club", dijo el presidente blanco. A partir de ahí, Mourinho inició una cruzada particular que ha desembocado en su idea de dejar el club en junio. Su cruce de mensajes con Valdano ha evidenciado la distancia entre ambos.

NUEVO GIRO En medio de esa guerra, Florentino ha dado un nuevo giro y se ha decantado por el entrenador portugués al recortar las competencias del director general, según informó la Cope el domingo. Una decisión que adoptó Pérez después del encuentro de copa ante el Atlético y que el propio Mourinho dejó clara tras el choque ante el Mallorca. "Yo solo reporto con Florentino y José Angel Sánchez sobre fichajes", declaró el entrenador del Madrid.

Sánchez llegó al club de la mano de Florentino y se mantuvo durante el mandato de Ramón Calderón como director general de marketing. Posteriormente ha pasado a ser director general ejecutivo. Ya intervino en algunos fichajes, como el de Zidane. Ahora se consolida como hombre fuerte en las decisiones del club y se convierte en el hombre elegido por Florentino para relegar a Valdano en favor de Mourinho. Todo sea por intentar poner un punto de equilibrio en un club donde manda la tensión por encima de todo.

Eso es algo que también nota el equipo, cuyo rendimiento ha ido a menos desde el 5-0 el Camp Nou. Desde entonces, el Madrid no saca adelante los partidos la autoridad de antes. Mourinho lo sabe y se centra en la Copa del Rey, en el partido de mañana ante el Sevilla, como demostró reservando a zil y Xabi Alonso 45 minutos el domingo.