Es la comidilla también en la selección: el fichaje de Mourinho por el Madrid. Florentino Pérez vuelve a hacer un guiño a la crisis y está dispuesto a lo que sea por meter en nómina al antídoto de Guardiola. Mientras otros clubs hablan de un recorte del 20 por ciento en su presupuesto, como es el caso del Atlético, el presidente del Madrid, quiere atar a Mourinho esta misma semana. Solo falta bajar la penalización. Una cifra que ha pasado de los cerca de 10 millones a 16, según mantiene Massimo Moratti, presidente del club italiano.

Nadie quiere que la contratación del sustituto de Pellegrini se convierta en un culebrón. La idea del mandatario blanco era no gastar lo mismo que la pasada campaña, 260 millones. Se habló de la mitad o menos, pero su calculadora ha saltado por los aires al saber que el precio de Mou se acerca a lo que se pagó por Kaká hace poco menos de un año, 67 millones. Pérez está a punto de cerrar la contratación más costosa en lo que a un entrenador se refiere.

Jorge Mendes, representante de Mourinho, apareció ayer por el Bernabéu para comenzar a escribir el borrador del contrato. Cuatro temporadas, a razón de 10 millones de euros netos por cada una de ellas. El Madrid pretende pagarle cerca de cinco millones fijos y el resto, en incentivos. A esa cantidad hay que sumar los 16 millones que Moratti asegura son los que se deben pagar.