Cacereño - 3: Josete, Palero, Roberto, Tito, Antonio Jurado, Lolo, Estévez (min. 65, Sergio), Chumi, Valtierra (min. 77, Rubén Jurado), Rai (min. 46, Toni), Rocha.

Yeclano - 1: Vicente, Pedro (min. 98, Juan Carlos), Jota, Rumbo, Valdeolivas, José Ramón, Meneses (min. 70, Tomás), Pablo Box, Raúl (min. 75, Andrés), Biri, Tonete.

Goles: 1-0: min. 91, Toni; 2-0: min. 94, Rubén Jurado; 2-1: min. 106, Juan Carlos; 3-1: min. 111, Toni.

Arbitro: González Fernández (leonés) (2). Amonestó a los locales Tito, Lolo y Toni; mientras que por los visitantes sacó cartulina amarilla a Pedro, José Ramón, Tomás y Andrés.

Incidencias: Partido disputado en el estadio Príncipe Felipe ante unos 2.800 espectadores. Tarde muy calurosa.

Después de 90 minutos de nervios, de imprecisiones y de claras ocasiones falladas, el Cacereño comenzó a encarrilar la eliminatoria ante el Yeclano a los 20 segundos de la prórroga, cuando Toni abrió la lata y mostró el camino a sus compañeros para pasar a la siguiente ronda de la fase de ascenso a Segunda B.

Antes se vio a un Cacereño que con un fútbol poco vistoso lo intentó, aunque sin poner en práctica el juego por las bandas que durante toda la semana se propuso como la fórmula para ganar al Yeclano, acostumbrado a jugar en un campo pequeño y que se podía ver perjudicado por las dimensiones del Príncipe Felipe.

El Cacereño jugó de menos a más en las dos partes del tiempo reglamentario. Le costó entrar en juego. El conjunto verde salió con la intención de controlar el balón, pero este quemaba en los pies de los jugadores. Pesaba la responsabilidad y los pases imprecisos fueron la conclusión lógica de esta actitud.

ROCHA, EL MAS INCISIVO Con Rai y Valtierra desaparecidos, Rocha se erigió en el estilete ofensivo. El futbolista local estuvo muy rápido durante todo el partido, con mucha presencia tanto en el centro como en el área rival, y de sus botas salieron las que quizás fueron las ocasiones más peligrosas del Cacereño.

Si el balón quemaba a los futbolistas del Cacereño, los del Yeclano tampoco parecían apreciarlo mucho. No aprovecharon las imprecisiones para acercarse a la portería de Josete, salvo un par de ocasiones nacidas de los pies de Tonete, un delantero bajito y con muy buen regate, que se enfrentó a una defensa verde que por momentos parecía estática.

Angel Alcázar sabía que su equipo lo podía hacer mejor y desde el minuto 16 empezó a gritar a sus jugadores por la precipitación en sus ocasiones --Rai malgastó un claro contrataque en ese momento tirando a puerta desde el centro del campo-- y para que abrieran el juego.

Pasado el primer cuarto de hora empezó a aparecer un Cacereño capaz de hacer fútbol, al menos a ráfagas. En el 19 Estévez botó un córner muy cerrado que Vicente sacó con apuros. En la siguiente jugada, una rápida galopada de Rocha por la izquierda acabó con un pase a Valtierra, pero no le llegó el balón, porque un defensor murciano se lo quitó de los pies cuando se disponía a empalar a portería.

En el 26, otra rápida carrera de Rocha acabó con el balón cruzado en exceso. Dos minutos después, Estévez sacó una lejanísima falta que Vicente despejó con la mano entre un barullo de jugadores. Fueron minutos de acoso del Cacereño, que terminaron con la ocasión más clara de la primera parte. Fue una jugada que inició Rocha --otra vez Rocha-- en el centro del campo, sirvió a Estévez que le puso el balón en el pie a Rai, que con el portero ya superado tiró inexplicablemente por encima de la portería.

No hubo suerte, pero la velocidad era el camino para superar a la defensa del Yeclano. El problema era que ayer el calor impidió a los jugadores rendir al cien por cien y correr todo lo necesario.

La segunda parte siguió en la misma línea, pero con un Yeclano algo más ambicioso y con más ganas de tener el balón. Pero solo fueron 20 minutos, los que tardó el Cacereño en tener su primera ocasión, otra vez de Rocha.

Como el Guadiana, el juego del Cacereño aparecía y desaparecía. Tan pronto creaba una ocasión de peligro como empezaba a haber pases imprecisos y errores defensivos. En los últimos minutos de la segunda parte gozaron los locales de las mejores ocasiones, con tiro al palo de Lolo incluido y un cabezazo de Toni que Vicente sacó con los pies.

Era el camino para la prórroga a la que irremediablemente se dirigían. Y así fue. A los 20 segundos marcó Toni, y en el 94 Rubén Jurado. Los dos habían entrado de refresco en la segunda parte.

Con el 2-0, el partido parecía estar sentenciado, aunque el visitante Juan Carlos puso algo más de emoción al recortar distancias (2-1) nada más comenzar el segundo tiempo de la prórroga. Pero en el 111 Toni sentenció (3-1).

Una victoria sufrida y peleada, que permite al Cacereño estar hoy en el bombo y el próximo fin de semana iniciar la segunda ronda de la fase de ascenso a Segunda B. Alcázar tiene ahora que recuperar a sus jugadores del gran esfuerzo físico.