Luto en el Cacereño. El que ha sido su médico más conocido y carismático durante alrededor de 30 años, Agustín Ramos Guija, falleció ayer en la ciudad víctima de una grave enfermedad.

La capilla ardiente del reputado médico ha sido instalada en el tanatorio San Pedro de Alcántara, en la sala número 6. La misa funeral será hoy, en la capilla, a partir de las seis de la tarde.

De Ramos Guija, que ya jubilado ha recibido el reconocimiento público a través de un homenaje y al que también el anterior gobierno municipal decidió poner su nombre al complejo deportivo de La Mejostilla, se ha destacado por encima de todo su humanidad y desinteresado apoyo al club, y de hecho nunca cobró por sus múltiples servicios a la entidad. Su muerte deja, sin duda, una huella imborrable en la historia de la ciudad en general y del Cacereño en particular.