Tenía 89 años y hace menos de un mes y medio se convirtió en el vencedor del Tour de mayor edad tras el fallecimiento del suizo Ferdi Kubler, que había ganado la prueba en 1950.

Roger Walkowiak fue el ganador de la ronda francesa de 1956, una edición muy especial, un corredor menudo y de quien siempre se había dicho que era el triunfador en la capital francesa, quizá, con menos talento. De hecho, cuando un corredor ha estado a punto de ganar la carrera gracias a una escapada, de las consentidas habitualmente, siempre se ha dicho que podría ganar a "lo Walkowiak", término que se hizo famoso gracias a colarse en una fuga en Turín que le otorgó la victoria sin figurar en ningún pronóstico de la época.

Walko ganó un Tour cuando Louison Bobet ya era demasiadoviejo y Jacques Anquetil excesivamente joven y todavía faltaban algunos años para que se intensificase el tremendo duelo que siempre vivieron el luxemburgués Charly Gaul y Federico Martín Bahamontes, 'El Águila de Toledo', que desde este martes se ha convertido en el vencedor del Tour de mayor edad. Bahamontes tiene 88 años y es el único superviviente de una década de los 50 que también estuvo marcada por el dominio de Fausto Coppi.

DOS ETAPAS EN LA VUELTA

Walko ha fallecido cerca de Vichy, según ha hecho público su familia. Su palmarés, enriquecido sobre todo por su triunfo en París, recoge también dos victorias de etapa en las Vueltas de 1956 y 1957y una segunda posición en la París-Niza (1953) y el Critérium del Dauphiné (1955).

Durante estos últimos años Walko se dejaba ver en el Tour, un anciano de baja estatura, delgado, que subía al podio y entregaba algún trofeo. En 1956, la 17ª etapa que partió de Gap, considerada la puerta de los Alpes, y finalizó en la ciudad italiana de Turín estuvo marcada por la fuga en la que se coló Walkowiak.

Se vistió de amarillo a falta de cinco etapas para finalizar la prueba y se dedicó a administrar "a lo Walkowiak" la renta conseguida. Ganó con 1.25 minutos de ventaja sobre el francés Gilbert Bauvin y 3.44 minutos con el belga Jan Adrianesens, con Bahamontes instalado en la cuarta plaza a diez minutos del jersey amarillo.