El primer objetivo está cumplido para Garbiñe Muguruza. La española ha alcanzado la cuarta ronda del Abierto de Australia como debía hacerlo por su ránking, número 7 mundial. Lo ha conseguido sin demasiados problemas al vencer en el último partido de la jornada a la letona Anastasija Sevastova por 6-4 y 6-2.

Un 0-2 en contra de salida ha sido la alarma que ha despertado a una Muguruza que ha comenzado poco activa de piernas y demasiado contemplativa ante Sevastova. La tenista letona, número 33 mundial, le había eliminado en primera ronda en el Abierto de Estados unidos el año pasado y parecía tener la fórmula para volver a poner en aprietos a la española. Pero Muguruza ha respondido con contundencia a la amenaza. Un poderoso saque y más agresividad en su juego, especialmente con la derecha, le han permitido ganar cinco juegos seguidos para tomar el mando de la situación. Sevastova ha cortado la hemorragia con un segundo 'break' para acercarse en el marcador (5-4) aunque no ha podido evitar que Muguruza se apuntara la primera manga en 37 minutos.

UN ALTO NIVEL

En el segundo set Muguruza ha mantenido su alto ritmo de juego para volver a adelantarse en el marcador por 4-0 y acabar el partido en 64 minutos, demostrando un alto nivel de juego. prendida en la pista y preparada para el combate que comienza ahora en busba de las últimas rondas. "Hoy me he sentido bien en la pista, especialmente con el saque y la derecha. He podido dominar ante una rival que me ganó hace unos meses".

Muguruza se enfrentará en octavos de final, este domingo, a la rumana Sorana Cirstea (número 78 mundial) que ha derrotado a la estadounidense Alice Riske por 6-4 y 7-6 (7-2).