El mundo del deporte, la política y la empresa han dado hoy su último adiós al presidente de honor del Comité Olímpico Internacional (COI), Juan Antonio Samaranch, que murió ayer en Barcelona a los 89 años, en una ceremonia civil en el Palau de la Generalitat con la presencia de los Príncipes de Asturias, el president José Montilla y numerosas personalidades.

En un emotivo acto en el Saló Sant Jordi, Montilla ha situado el momento en que Samaranch pronunció A la ville de... Barcelona en Lausana como uno de los registros sonoros más importantes de la historia reciente de Catalunya, comparándolo con Pau Casals y Josep Tarradellas, con sus célebres frases I am a Catalan (1971) y Ja sóc aquí (1977).

El príncipe Felipe, en un discurso pronunciado en catalán y en castellano, ha asegurado que Samaranch "ocupa un lugar en la generación de catalanes" que "han contribuido de forma decisiva al progreso y proyección del Estado español en el mundo".

EMOTIVO HOMENAJE

La trayectoria de Samaranch ha sido glosada también por el presidente del COI, Jacques Rogge, y por su hija Maria Teresa Samaranch, entre otros, durante un homenaje institucional que ha culminado con la interpretación de Amigos para siempre, la emblemática canción de los JJ.OO. de Barcelona'92.

La dimensión humana, institucional, deportiva y económica de Samaranch ha planeado a lo largo de todas las intervenciones, que se han producido en la ceremonia celebrada en el Saló Sant Jordi, previa a la apertura al público de la capilla ardiente.

Entre otros, han asistido al institucional homenaje los Príncipes de Asturias, la infanta Cristina, el president de la Generalitat, José Montilla, los alcaldes de Barcelona y de Madrid, Jordi Hereu y Alberto Ruiz-Gallardón, respectivamente, y una gran representación política e institucional.

ENTREGA PERMANENTE A BARCELONA, CATALUÑA Y ESPAÑA

El príncipe Felipe ha destacado la "permanente entrega a Barcelona, Catalunya y España" de Samaranch, de quien ha dicho que le inculcó en su corazón el "espíritu olímpico". También ha afirmado que su ausencia es sentida por millones de personas de todo el mundo, especialmente por los amantes del deporte, quienes --ha precisado-- "han sentido latir sus corazones al son de las emociones olímpicas desde que se pusiera al frente del Comité Olímpico Internacional".

"Si hay una palabra que resuena en los cinco continentes con perfecta sintonía de colores y afectos es gracias", ha dicho el Príncipe, que ha subrayado que "nos ha dejado un coloso del deporte y del olimpismo moderno, y un español universal cuya firme lealtad a la Corona y permanente servicio a España nunca podremos olvidar".

MONTILLA: "UN HOMBRE DE SU TIEMPO"

El president de la Generalitat, José Montilla, ha afirmado que Samaranch fue "un hombre de su tiempo" y "hombre puente" entre épocas de tránsito, de la dictadura a la democracia, y que siempre "fue más capaz de pensar en el futuro que en el pasado".

El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, le ha calificado de "señor de Barcelona" y de "barcelonés, catalán y español universal", además de destacar que puso a Barcelona en el mapa mundial al impulsar los Juegos de 1992.

Narcís Serra, alcalde entre 1979 y 1982, cuando se gestó la candidatura olímpica, ha afirmado que la aportación de Samaranch fue "decisiva" para abrir España al mundo. "Fue una persona de una talla enorme: supo que el mundo estaba cambiando, lo entendió a la perfección y se orientó hacia el exterior. Antes de él no éramos intenacionales", ha comentado el actual presidente de Caixa Catalunya.

IMPULSO A LA PARTICIPACIÓN FEMENINA

El actual presidente del COI, Jacques Rogge, ha remarcado que Samaranch fue la personalidad olímpica más importante después del fundador de este movimiento, Pierre de Coubertin, así como su impulso para extender la participación femenina en todas las modalidades olímpicas.

Por su parte, el presidente del Comité Olímpico Español, Alejandro Valverde, ha ensalzado la figura universal de Samaranch como un hombre cuyo camino siempre fue "la paz".

GALLARDÓN : "IMPULSÓ LOS MEJORES JUEGOS DE LA HISTORIA"

El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha elogiado su papel como impulsor del olimpismo y, especialmente, como el líder que posibilitó "los mejores Juegos Olímpicos de la historia", en referencia a los de Barcelona en 1992.

El expresidente de La Caixa Josep Vilarasau se ha referido al fallecido como "presidente y amigo", y le ha calificado como un "luchador nato".

También ha intervenido el presidente de la Diputación de Barcelona, Antoni Fogué, que ha afirmado que Samaranch fue "un servidor público" y un "catalán ilustre", que siempre veló por el progreso.

EL DEPORTE, SU OTRA FAMILIA

La hija del expresidente del COI, Maria Teresa Samaranch, ha destacado que el mundo del deporte y sus profesionales fueron siempre "la otra familia" de Juan Antonio Samaranch, con quien ella y su hermano tuvieron que compartir el afecto de su padre.

En su intervención, Maria Teresa ha asegurado que su padre siempre tuvo "dos familias", la íntima y la deportiva, con las que se mostraba "plenamente feliz". Maria Teresa Samaranch, que ha agradecido la presencia de las numerosas autoridades, ha mencionado que el deporte siempre estuvo presente en la vida cotidiana del expresidente del COI.

"En las comidas familiares, el ambiente festivo quedaba subordinado a la televisión; la atención se desviaba de la mesa a la competición", ha relatado, y ha reiterado que el deporte ha estado y estará siempre presente en la familia Samaranch.

CEREMONIA EN EL SALÓ SANT JORDI

Los Príncipes de Asturias, Felipe y Letizia, el president Montilla y numerosas autoridades han recibido el féretro del expresidente del COI poco después de las 10 horas. La ceremonia ha empezado a partir de las 10.30 horas en el Saló Sant Jordi.

Tras cruzar la plaza de Sant Jaume, el féretro ha sido recibido en el Palau de Generalitat por una formación de gala de 15 Mossos d'Esquadra, con el silencio solemne de los múltiples asistentes y el sonido del carillón.

Acompañando a los familiares de Samaranch estaba la infanta Cristina, que siempre ha estado especialmente vinculada al mundo del deporte; el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, y el presidente del Parlament, Ernest Benach, entre otros.

SOLO LA BANDERA OLÍMPICA

La plana mayor de la clase política e institucional catalana ha asistido a este primer acto de despedida para quien está considerado como el padre del olimpismo moderno. Tanto en el Palau de la Generalitat como en el Ayuntamiento de Barcelona hoy solo ondea la bandera olímpica.

La capilla ardiente ha quedado abierta al público a partir de las 12 horas, para que los barceloneses puedan dar el último adiós a una figura que tuvo un papel clave en la celebración de los Juegos Olímpicos de 1992.