El día después de la marcha del presidente, Juan Francisco Luis, reconocían en la oficina del Cáceres en el pabellón multiusos, fue distinto a cualquiera del resto de la temporada. Un sentimiento de soledad, mezclado con unas dosis de esperanza, "a ver si se arregla esto", afirman, se palpaba en la sede. Nadie llegó con el dinero para pagar, ni a los trabajadores, ni a la plantilla, ni a los técnicos de un proyecto a la deriva pero no hundido ya que, dicen, "mientras hay vida hay esperanza".

"Al llegar me he sentido con más responsabilidad, he despedido a los jugadores en el autobús que iba a Tarragona y me he puesto a trabajar; la mañana ha sido atípica, sí, lo reconozco". Julio Espino, el gerente que renunció a su cargo, está obligado a continuar como empleado y, hoy por hoy, es quien manda en el día a día en el club, aunque, aclara él mismo, "no voy a tomar decisiones sobre el futuro de la entidad porque no me corresponde aunque, ahora más que nunca, no voy a abandonar".

Dimitido el presidente y con él la junta directiva, Espino y la admnistrativa Julia Cintero --la única que ha resistido a todo en doce años--, se afanaban ayer por la mañana en que todo fuera normal. "Mi conciencia me dice que tengo que seguir aquí, en el día a día, hasta que se adopte una solución". Espino quiere mantenerse al margen, no volver a salir en la foto como el día de su renuncia e insiste en que lo importante es que "el dinero llegue, por encima de quien sea el presidente; ya organizaremos todo como sea, pero lo urgente es que la gente cobre".

Espino no sabe hasta cuándo durará la situación en la que viven. "Sólo se que vamos a hacer todo lo posible y que vamos a estar en el día a día" pero, advierte, "necesitamos la ayuda de todo el mundo, de toda la ciudad. Está claro que tiene que ser rápido y puede haber visos de solución, pero no tengo claro cómo".

CRITICAS DEL PSOE Mientras, los últimos acontecimientos, especialmente la explosiva rueda de prensa del ya expresidente, han generado fuertes críticas por parte del PSOE. La portavoz del Grupo Municipal en el ayuntamiento, Carmen Heras, y el responsable en materia deportiva, José Ignacio Fernández, manifestaron ayer que "la firma del alcalde no vale nada", en referencia a la imposibilidad de recibir la subvención de 360.000 euros (60 millones de pesetas). Según los socialistas, el PP "descendió al Cáceres de la ACB y ahora parece que lo hará de la LEB". Fernández preguntó: "¿Dónde está esa ayuda?". Del concejal de Deportes y expreparador físico, Lázaro García, apuntó: "Abandona el barco como las ratas. El se baja del barco en llamas para que se hunda para colocarse de concejal con dedicación exclusiva".

Mientras, el concejal de Deportes dijo que "la gente tiene que recordar qué ha pasado: el PSOE ha ido quitándole estos años dinero de las subvenciones al Cáceres y nosotros hemos subido; eso está ahí". Del mismo modo, dijo desconocer si alguien se puede hacer cargo del club.