Rafael Nadal lo tiene claro. Los elogios están bien y suenan a música celestial, pero hay que olvidarlos rápido, muy rápido. Su tío Toni siempre se lo recuerda: "De los récords y de los homenajes hablaremos cuando te retires". Ayer, apenas 24 horas después de haber ganado el Abierto de Australia, se mostraba cauto ante la avalancha de felicitaciones recibidas tras su triunfo. "No hay que soñar mucho. No puedo creerme que soy el mejor, solo soy el más regular, pero eso viene y se va. Llevo cuatro temporadas logrando títulos importantes, pero uno nunca sabe cuándo termina", dijo poco antes de marchar de Melbourne.

La prensa internacional ensalzaba su triunfo ante Federer ya sin discusión. En Australia ha reafirmado su condición de número uno mundial, que muchos ponían en duda a pesar de su victoria en Wimbledon el año pasado. Rafa Nadal se ha ganado el respeto y figura ya entre los grandes del tenis mundial a sus 22 años. No solo eso, ahora empieza a contar para batir los grandes récords.

El sueco Mats Wilander, en su artículo en L´Equipe, le comparaba ayer a Jimmy Connors. "Su único límite será físico", decía el excampeón sueco. En España ya se preguntan si Nadal puede ser considerado el mejor deportista de la historia. En la consulta realizada ayer por este diario con grandes campeones, estos coincidían que está en camino.

RECORD DE ORANTES "En tenis ya es el mejor de todos y está en el camino de batir récords. Si no tiene lesiones, no tiene techo", aseguraba Manuel Orantes, al que Nadal igualó en Australia el récord de títulos en el circuito ATP, con 32.

El excampeón español, que es el último vencedor del Abierto de Estados Unidos (1975), no solo destacaba el éxito de Nadal en Melbourne. "Hacer lo que ha hecho en 12 meses, ganar ganar Roland Garros, Wimbledon, la medalla olímpica de oro y Australia, me parece increíble. Pero yo admiro más su conducta. Lo da todo en la pista y fuera es modesto. Es un ejemplo. Lo que hizo en la final contra Federer demuestra la pasta con la que está hecho". Nadal ya es para todos es un modelo de deportista. Su manera de entender el deporte es un ejemplo para los niños. "A partir de él, vamos a ver a tenistas de físico envidiable y de una mayor dureza mental, de los que pelean todos los puntos, se vacían y no dan una bola por perdida", valoraba Juan Antonio San Epifanio, medalla de plata en los Juegos de Los Angeles.