El español Rafael Nadal remató hoy un agónico e interminable partido, accidentado por la lluvia, ante el sueco Robin Soderling, al que se impuso con un 6-4, 6-4, 6-7 (7), 4-6 y 7-5 para meterse en octavos de final de Wimbledon. En la pista 1, el zurdo de Manacor resolvió el encuentro de tercera ronda de la competición ante el jugador nórdico tras cinco días, 4 horas y 1 minuto.

Hasta 6 bolas de partido llegó a tener el mallorquín, 5 de ellas en la quinta reválida y una en el 7-6 del "tie-break" para rubricar, finalmente, lo que llegó a convertirse en casi un purgatorio, al haberse previsto ese choque para el sábado y tenido, ya entonces, que posponer por la lluvia. Pese a un comienzo dubitativo, en el que Soderling se anotó sin problemas el primer juego y Nadal igualó con ligera dificultad, el español llegó a encontrarse en su elemento en la pista rápida.

La primera manga, de poco más de media hora, no planteó posteriores quebraderos de cabeza al jugador de Manacor. El mallorquín se movió con soltura por la 1 y desbarató el servicio del nórdico en el séptimo juego. Durante el segundo, que se prolongó algo más de tres cuartos de hora, el rey de la tierra se permitió hacer alarde de jugadas vistosas con un saque poderoso y voleando más de lo habitual. Hizo "break" a Soderling en dos ocasiones -en el primer y en el séptimo juego-, mientras que el nórdico pudo romper a Nadal en el sexto.

La lluvia, protagonista

La lluvia volvió a interferir en el camino del tricampeón de París. De nuevo, hubo que recurrir a las lonas verdes a toda prisa debido a otro chaparrón que cayó cuando el marcador indicaba 3-4 a favor del zurdo de Manacor. El parón de casi tres horas no afectó, apenas, al juego de Nadal, que remató el set por 6-4. A partir del tercer set, Soderling se recompuso. Comenzó sacando sin tropiezos, con un saque poderoso que le reportó a lo largo del partido 21 "aces", 16 más que Nadal, y logró salvar un punto de rotura para llevarse el primer juego de este segundo set.

Nadal, que volvió a romper el servicio de su rival en el tercer juego del tercer examen, se puso, de nuevo, por delante. Fue en este momento cuando el juez de silla pidió al mallorquín que fuera "un poco más rápido" a la hora de sacar. Soderling desaprovechó otro punto de rotura en el quinto juego; aunque finalmente igualó a 3 con el español para tomar ventaja con el 4-3. Otra vez el sueco quebró el servicio del balear para apuntarse el 5-3. En total, Soderling logró romper al español en cinco ocasiones, de quince oportunidades de break.

En este punto, fue el tres veces campeón de Roland Garros el que recargó las pilas, rompió el saque de su adversario y convirtió el 5-4 para empatar a 5 a continuación. El final de la manga fue muy disputado y el encuentro tuvo que resolverse en el desempate, en el que Nadal se puso por delante con 7-6 y tuvo en su mano una ocasión de hora de convertir una bola de partido. Falló el mallorquín y se prolongó la agonía.

De nuevo hizo irrupción la lluvia interrumpiendo, una vez más, el transcurso del choque a los 69 minutos de set, para interrumpir el duelo durante casi dos horas. Al regresar, fue el sueco el que se anotó el tercer set en el desempate por 7-6 (7). Soderling, que incurrió en un total de 52 errores no forzados, frente a los 40 que hizo Nadal, volvió a dominar en el cuarto. Hizo sufrir al mallorquín con un gran servicio; llegó a tener tres bolas de set para finalmente rubricar esta manga por 6-4.

El encuentro, que se interrumpió un total de 7 veces -más un octavo amago hoy, en el quinto set- hubo de paralizarse de nuevo para reanudarse el martes. La continuación de ayer volvió a ver a un Soderling crecido, que reanudó el choque con contundencia, rompiendo el servicio del número dos. Se trató de un set disputado, que duró 52 minutos y vio a un Nadal tenso -que a lo largo de todo el encuentro quebró al nórdico en 7 ocasiones de quince oportunidades- y que también hubo de posponerse hasta hoy por la lluvia.

Aunque en la 1 hubo otro amago de chubasco, el segundo favorito, que llegó a disponer hoy de cinco bolas de partido en esta manga decisiva, logró resolver por 7-5. El campeón de Roland Garros tendrá como próximo adversario al ruso Mijail Youzhny, decimocuarto favorito, que venció el lunes al finlandés Jarkko Nieminen, decimoctavo cabeza de serie.