Rafael Nadal lució biceps antes de debutar en el Abierto de Australia. El campeón se entrenó con el torso descubierto, el calor apretaba (32 grados) y los fotógrafos aprovecharon para descubrir a un Nadal mucho más delgado pero igual de musculado que siempre. El número 2 del mundo se siente a punto para iniciar mañana (09.00 horas, Eurosport) la defensa del título en el partido que abrirá la sesión vespertina en la Rod Laver Arena ante el australiano Peter Luczak (número 78 del mundo).

Nadal tiene ganas de empezar. Su nueva raqueta está ya afinada para encontrar las mejores sensaciones sobre la rápida pista azul en la que el año pasado hizo llorar a Roger Federer. "La espera se está haciendo un poco larga y ya tengo ganas de empezar. He entrenado bien todos los días, hoy un pelín peor, pero me siento en buena línea para intentar hacerlo lo mejor posible aquí", aseguró.

CUESTION DE CONFIANZA Se siente capaz de volver a ganar en Australia pero quiere ir como siempre paso, no obstante no gana un torneo desde el Masters 1000 de Roma el año pasado, de eso ya hace más de seis meses. "En pista dura hay un montón de buenos jugadores. Creo que incluso siendo el número 2 del mundo no soy el máximo favorito, aunque si uno de ellos. Me siento bien pero eso no quiere decir que vaya a llegar a las semifinales, a la final otra vez o a ganar", comentó.

De mañana hasta el 31 de enero, día de la final, le quedan seis partidos que irán complicándose a medida que pase rondas. "La única manera de tener confianza es ganar partidos y las victorias en Abu dabi y Doha me han puesto en el buen camino y ahora lo único que me preocupa de verdad es jugar bien", destacaba. Su primer rival, Luczak (30 años), no parece que pueda complicarle la vida, aunque el australiano de orígen polaco (nació en Varsovia) se mostraba dispuesto a sorprenderle. "No tengo nada que perder", aseguró tras conocer que iba a enfrentarse al campeón. "Se que es muy luchador y que es sólido desde el fondo de la pista así que habrá que superarlo por ritmo", dijo Nadal que se enfrentará a él por primera vez.

TRIUNFO DE VERDASCO Verdasco demostró porqué está en esa lista de outsiders capaces de dar el golpe. El tenista madrileño, que el año pasado estuvo a dos puntos de eliminar a Nadal en las semifinales de Australia, ayer se impuso en el torneo de exhibición de Kooyong de Melbourne, antiguo escenario del Abierto de Australia, al vencer en la final a Tsonga por 7-5 y 6-3, después de haber eliminado a Djokovic y Fernando González.

"Espero que estas tres victorias me ayuden en la próxima semana y ojalá pueda jugar tan bien como lo he hecho estos días", valoraba feliz ayer Verdasco que durante las últimas semanas estado trabajando muy duro en el gimnasio en Las Vegas a las órdenes de Gil Reyes.

Además de Nadal hoy debutarán en el torneo Feliciano López ante el uruguayo Pablo Cuevas, Guillermo García-López ante el suizo Stanislas Wawrinka y Maria José Martínez contra la rusa Evgeniya Rodina.